Buenas, soy Emilio Calatayud. Hoy he pasado un buen día. Han venido a visitarme al juzgado padres, madres y alumnos del Colegio Público Emilio Calatayud (valga la redundancia), que está en Numancia de la Sagra, provincia de Toledo. Siempre he dicho que me dieron la alegría más grande de mi vida cuando decidieron ponerle mi nombre al ‘cole’. Lo hemos pasado bien. Los chavales, y en particular una niña, venían a participar en Granada en una competición de artes marciales y, de paso, han tenido el detalle de venir a verme.
Me han dicho que están «muy orgullosos» de que su cole se llame Emilio Calatayud. Pues anda que yo. Me he emocionado. Hasta me he olvidado de Putin por un rato.