Buenas, soy Emilio Calatayud. Sobreproteger a los hijos es desprotegerlos. Les transmitimos nuestros miedos y, en realidad, lo que queremos hacer es protegernos nosotros del temor a que les ocurra algo, que es algo que no se puede controlar.
Por eso un niño sobreprotegido puede llegar a medir 1,90, pero no habrá crecido.