Buenas, soy Emilio Calatayud. Seguro que muchos de los que leéis este blog habéis escuchado eso que dicen los hijos cuando están enfadados porque no se han salido con la suya: «No haberme tenido. Yo no lo pedí». Ante eso, se pueden hacer dos cosas: mandarlo a tomar vientos, es decir, a la calle, y que se busque la vida, pero es duro, y más ahora que por fin llueve y hace frío. La otra salida es decirle que es un fruto del amor, que le queréis y que, precisamente porque le queréis, le ponéis esos límites que a él le enfadan.