Buenas, soy Emilio Calatayud. Quiero dar las gracias a los vecinos de la localidad granadina de Pinos del Valle por concederme el honor y el placer de encender su Navidad. Ha sido muy bonito y el alcalde, Francisco Titos, me lo ha puesto fácil al guiarme para que no metiera la pata. Todo ha salido bien y las luces navideñas ya alumbran las noches precioso pueblo que está situado entre Sierra Nevada, las playas de Granada, la Alpujarra y la capital. Mejor, imposible. Para completar el cuadro está rodeado de naranjos y tiene una gastronomía que no os podéis perder.
A los vecinos les he dicho que la Navidad es una fiesta católica en la que celebramos el nacimiento del Niño Dios y que no les pidan a los Reyes Magos que les traigan móviles a los chiquillos, ja, ja, ja. Cada vez que tengo oportunidad meto la cuña.
Muchas gracias de nuevo a las buenas gentes de Pinos del Valle. Me ha hecho mucha ilusión. Me he sentido como un niño, que es cuando más se disfruta de la Navidad.