Buenas, soy Emilio Calatayud. Siguiendo un poco con lo que comentamos ayer de Shakira y Piqué, hay que tener una cosa muy clara: Vender muchos discos o meter muchos goles no te convierte en una buena persona. Tampoco pintar grandes cuadros o hacer películas muy taquilleras. O hacer discursos históricos o escribir obras maestras. Se puede ser un genio y eso no impide ser una mala persona. Seguro que a nuestro alrededor hay muchas buenas personas. Van a la compra, cuidan de sus hijos, viven con lo justo, pagan los impuestos…, en fin, que no son espectaculares, pero son buenas personas…