Buenas, soy Emilio Calatayud. La justicia salmantina ha librado a un padre de seguir pagando a su hija de 29 años la pensión de alimentos, 125 euros mensuales. Los jueces consideran probado que no ha hecho nada para buscar empleo, es decir que es una vaga. Además, no demuestra ningún afecto por su padre. Siempre digo que si uno es un ‘nini’ -una de esas ‘personas humanas’ que ni estudian ni trabajan porque no les da la gana- por lo menos que sea cariñoso. Pero en este caso, ni eso.
La joven en cuestión cobraba la renta de inserción y vive con su pareja en otra ciudad.