Buenas, soy Emilio Calatayud. Ha ocurrido en Asturias y al final parece que ha imperado la cordura. Unos padres separados, y con custodia compartida, llegaron a programar dos comuniones para su hija porque no se ponían de acuerdo en una única fecha. Parece ser que al final han recapacitado y no incurrirán en semejante disparate. Para empezar, la Primera Comunión solo puede ser una. Por eso se llama así. Y para continuar, bastante bien salen algunos hijos con los padres que tienen. Hemos perdido el norte.