Buenas, soy Emilio Calatayud. Lo he ido dejando pasar y casi se me olvida, pero es que ya estoy en fase de olvidar. Quería hablar de la despedida del fútbol del bético Joaquín. Me emocionó y vi lo que debería ser el fútbol y, por desgracia, ya no lo es: compañerismo, deportividad, alegría, amistad…, pero ahora mandan la bronca, los petrodólares, los chanchullos…
Decía Joaquín que no sabía qué había hecho para recibir tanto cariño: pues dar cariño. Eso debería ser el fútbol. Y la vida. Gracias, maestro.