Hay condenados que me dan besos, pero la mayoría de los que absuelvo no quieren saber nada de mí

Foto: Alfredo Aguilar.

Buenas, soy Emilio Calatayud. La Justicia de Menores es diferente a las otras justicias. Siempre se lo digo a los fiscales y los jueces que vienen a hacer prácticas a nuestros juzgados. El rigor es el mismo que en las otras justicias, pero las formas son diferentes. Incluso muy diferentes. A mí me gusta que sea así. Por eso no me jubilo.

Es que hay condenados que me dan besos. Eso sí, la mayoría de lo que absuelvo no quieren saber nada de mí. ¿Es el mundo al revés? No, es el mundo de la justicia de Menores.

 

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