Buenas, soy Emilio Calatayud. Hay niños que piden poner el árbol de Navidad desde agosto por el tema de los regalos. La Navidad, que a muchos se les olvida, no es un botellón, sino una fiesta religiosa en la que los católicos celebramos el nacimiento del hijo de Dios. Con esa actitud no es extraño que los niños no estén saliendo unos consumistas de cuidado. Y eso hay que pagarlo.