Buenas, soy Emilio Calatayud. Ayer comenté que perdí la cartera y me la devolvieron intacta, una demostración de que la buena gente y la buena educación existen. Hoy toca la cruz. En un pueblo de Graná, han matado a golpes a un gato callejero y luego lo han dejado colgado en la fachada de la casa de la mujer que le daba de comer. Creíamos ya que la cultura del respeto a los animales había calado entre nosotros, pero mira cómo salen algunos. La mala educación mata. Y además es delito.
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