Buenas, soy Emilio Calatayud. Leo en Ideal que una madre de Granada (presuntamente) agredió al árbitro durante un partido entre niños de diez años. Fue este pasado sábado. Y el viernes, un padre (presuntamente) agredió al entrenador de su hijo porque no lo sacaba a jugar durante un partido de niños de diez años. Estas cosas sí que traumatizan a los niños. Bastante bien salen algunos chiquillos con los padres que tienen.
Padres violentos en partidos de fútbol de niños de diez años en Granada, bastante bien salen algunos niños con los padres que tienen
Lo llevo viviendo desde que mis hijos eran pequeños, se reian de mi cuando aplaudia al contrario por que msrcaban.. Y mis hijos tambien. Pero los padres evolucionan cada vez menos. Tenemos lo que criamos casi siempre.
Naturalmente Emilio. Es la naturaleza. Naturaleza de padres impulsivos que no entienden de nada y, por ello, como no entienden de nada, agreden; dando el ejemplo a sus hijos de unos padres que quisiera llamarlos desgraciados. Y claro! Así van los hijos en todo su futuro, a agredir y utilizar violencia.
Es lo típico de este siglo, la violencia. Seres humanos infatu
os, amadores de sí mismos, desleatales.
Es lo que toca vivir a partir de ahora. Partidos repletos de violencia, ultras y los que son y la madre que los parió
Buenos días, soy padre de una niña de 11 años y ayer un árbitro nos dio ejemplo como se debe educar y enseñar , no nos pito un penalti en contra faltando 1 min para acabar el partido enseñando a las niñas como se debe de hacer y la verdad ni los padres ni las niñas protestaron ,felicitar a los jueces en ocasiones mal vistos.Felicidades
Tarjeta Roja a los Padres…. La educación debe de empezar en casa, no en el Colegio. AQUÍ SE COMPLEMENTA COM LA DE LA FAMILIA.
Lo he vivido como Maestro y Árbitro de Balón Mano
Ya he visto a esa clase de padres..vuelcan sus frustraciones en esos partidos..es terrible el rato tan horrible que les hacen pasar a los niños..y a otros padres.
Así es.
Correcto. Un saludo y gracias.
Muy bien por ese árbitro.
No pierdas la esperanza. Un saludo.
Pues hacías muy bien en aplaudir al contrario. Eso es educar.