Estambul es una de las ciudades que más me gustan del mundo. Estambul, antigua Constantinopla y más antigua aún, Bizancio. Estambul, una ciudad que son tres ciudades. Estambul, puerta entre el este y el oeste, ciudad milenaria, cosmopolita, abierta, enigmática. Estambul.
Y Mercan Dede. Uno de los músicos más especiales del mundo, personal como él solo, cuyo directo, sorprendente e hipnótico, como hoy comentaba con Panchi y mi cuate Pepe subiendo de la playa, es uno de los más cautivadores que jamás escuché.
Porque nos gusta la música, la mística y los sueños de los sufíes, porque nos gustan los sentidos trastornados y sobreexcitados, porque no nos gustan ni los límites ni los finales; por todo ello, esta noche del sábado es de Mercan Dede.
Jesús Lens.