Fue una película enigmática, difícil y contradictoria. Una película dura, atractiva, fría, intensa. Una película en el límite. Una película que dio que hablar y que está muy bien nominada para los Goya. Una película, como ocurre con el buen cine, que siendo muy local, con una Granada muy reconocible; resulta universal. Hablamos, por supuesto, de «Caníbal», y la reseñamos aquí.
Pero toda película parte de un trabajo literario previo. En forma de guion y, en algunos casos, como el que nos ocupa, de una novela. En este caso, de Humberto Arenal. Y ahora, los arriesgados chicos de la editorial Salto de Página recuperan el texto original. ¿No impresiona esa portada?
Ya estoy ansioso por hincarle el diente…
Mientras, voy a sumergirme en las páginas de «El hombre de arena» de Kepler. En una de sus novelas se basó la muy interesante «El hipnotista», película que vimos hace poco. ¿Volvemos al norte, Suecia y alrededores?
Jesús Lens