En un momento del espectáculo de Faemino y Cansado, el primero, el alto y deslenguado, cuando representaba el papel de un novato y advenedizo al que le los geniales humoristas del absurdo le daban la oportunidad de debutar, decía sentirse nervioso:

“- Estoy nervioso. Estoy muy nervioso. Estoy tan nervioso que tengo ganas de darle una hostia a un tío.”

Y nos descojonamos, claro.

Si habéis visto los vídeos que pinchábamos aquí, o los habréis amado o los habréis detestado.

Ni que decir quiere que, en estos tiempos de corrección política y enanismo mental en que vivimos, adoro el humor salvaje y brutal, sangrante, surrealista y, sobre todo, inteligente, de tipos como Faemino y Cansado.

Por eso, estando enfermo hace unas semanas, pensé que esto que esos vídeos que estáis viendo eran producto de mi imaginación, de mi mente enfebrecida y consumida por los delirios de la gripe.

¡Qué pena que a España no nos lleguen cosas como éstas! Yo pensaba que Rock era nada más que un comediante vulgar, protagonista de películas infumables. ¡Menos mal que está el Youtube! Y el Canal + Extra…

Jesús carcajeante Lens