25 KILÓMETROS DE VEGA

Los asiduos a esta Bitácora sabéis que, entre cosas, me gusta correr. Pero desde la conquista de aquella lejana Marasevilla, que supuso un punto de inflexión en mi escueta biografía como corredor, apenas hablo de dicha afición. Y mira que me provocó reflexiones y meditaciones

 

Pero no he dejado de correr, ni mucho menos. Lo que pasa es me cuesta centrarme en ello. Apenas he competido desde febrero e, incluso, me alejé de mis compañeros Verdes y su luminosa compañía, al sentirme lejano a sus proezas.

 

Con un puñado de Verdes...
Con un puñado de Verdes...

Este sábado, sin embargo, salí con ellos a hacer una impresionante ruta de 25 kilómetros por la Vega granadina, saliendo del Estadio de la Juventud, pasando por la Puleva, Pedro Ruiz, Fuente Vaqueros y, por fin, Pinos Puente.

 

Volví a sentir las mejores sensaciones y, cuando terminamos el recorrido en 1 hora y 58 minutos, a un promedio de 4,45 minutos el kilómetro, me sentí exultante. Tanto por el recorrido como por el kilometraje, por el tiempo empleado y, sobre todo, por el placentero bienestar de haber disfrutado con los amigos de una extraordinaria mañana atlética y, sobre todo, amistosa.

 

Pero dejo que sea Javi, uno de los amigos de Las Verdes, el que cuente más detenidamente esa estupenda mañana. Sigan el enlace y disfruten con la evocadora y precisa prosa de la Bestia Verde…

 

Jesús Lens. Bien encaminado.   

LAKERS, KOBE, PHIL & PAU, CAMPEONES DE LA NBA

En su segundo año en los Lakers lo ha conseguido. Pau es campeón de la NBA.

Los Lakers no dieron opción. El partido de esta noche ha sido inapelable y los Lakers han arrasado a Orlando, ganando el campeonato. Las claves: Kobe, MVP de los play offs. Y Phil Jackson, el grandioso Master Zen que ya atesora 10 anillos de campeón, al que dedicamos este cariñoso Post.

Además, Fisher y Ariza con sus triples. Odon y Bynum, con su defensa sobre Howard y, por supuesto, Pau. Pau Gasol, cuyo fichaje a mitad de la pasada temporada ha sido el desencadenante de que, hoy, los Lakers hayan ganado el anillo. En su Twitter, escribía el mítico Kareem Abdul Jabbar: «Pau is the «Maestro» because he can play the game in different styles.» Y Shaquille O´Neill twiteaba esto otro: «Congrats in spanish pau gasol, muchas gracias pappacito»

 

Recordamos, pues, aquella entrada que el año pasado dedicamos a Pau en el Proyecto Florens, sobre la importancia de saber poner fin a un ciclo, ser valiente y dar un paso adelante en tu carrera. ¿Qué pensarán hoy jugadores como Navarro o Vázquez, que pudieron estar ahí, y renunciaron, por diferentes razones?

 

Enhorabuena, Lakers. (Ver la FOTOGALERÍA de imágenes de la Final) 

REAL MADRID ESPERPENTOS CLUB Y OTRAS COSAS DE FÚTBOL

Hoy va de deportes. Esta mañana hablábamos de baloncesto y de la Magia del 23 y ahora pasamos al fútbol. Y es que, desde hace unos años, lo del Real Madrid es de traca. Pero todo eso ya lo saben ustedes. Si siguen el mundo del deporte, es ocioso repetirlo. Y no lo siguen, el tema les importa una higa.

 

Así que, concédanme un par de minutos para hablar de los sinsentidos blancos de las últimas fechas, yendo más allá de lo puramente deportivo.

 

Por un lado, la candidatura fantasma del tal Onieva. Resulta que organiza un acto de presentación, sale un sujeto al que nadie conocía, cuenta un cuento sobre el precio del tiempo, habla de Kennedy y Obama (al que prometen hacer socio de honor del Club) comunica que el club ayudará a pagar las hipotecas a los socios en paro… y todo el embolao se convierte en un chiste, replicado hasta el infinito por los medios de comunicación.

 

¿Se acuerdan de la famosa y repipi Niña de Rajoy?

 

Pues el pobre niño que le quiere comprar una hora de su tiempo a su atareado papá se ha convertido en la tumba de Onieva. Pobre. Para una vez que sale alguien con imaginación en el mundo del fútbol, se le lapida sin conmiseración alguna, se hace mofa de él, se le convierte en objeto de burla.

 

Por lo visto, el hombre sudaba, se le enredaba la lengua, asumió un protagonismo que no le correspondía, se convirtió en la vedette de la presentación… No sé. Yo escuché su cuento en la radio y me gustó esa forma distinta de plantear un proyecto deportivo. Y eso que el gran cuentista por excelencia del mundo del fútbol, el Jorge Valdano del miedo escénico, está con los Otros, con el siempre serio, regio y meticuloso Florentino Pérez.

 

Y es que lo de Florentino, aunque venga disfrazado de los tres Reyes Magos en uno solo, con Villas, Silvas y Kakas en las alforjas de su engolada caravana de camellos, me desconcierta.

 

¿Cómo es posible estar trabajando en la contratación de dos entrenadores tan rigurosamente diferentes entre sí como Mourinho y Wenger? Diferencias que, más allá de lo personal, tienen que ver con una forma de entender el fútbol, la cantera y la filosofía de trabajo de un Club.

 

Me ha gustado mucho el comienzo de este artículo de Pedro Santos, asesor de la Diputación de Orense, que hoy podíamos leer en ABC: «Es fundamental ante cualquier reto o compromiso social tener claro hacia dónde se quiere uno dirigir, y que metas se quieren alcanzar. Debido a la dimensión humanizadora de la cultura en el amplio ámbito de la palabra, debemos de formular un proemio que nos sirva de guía y candil para no desorientarnos en ese maremagnum de propuestas y compromisos que se van perfilando en el comienzo de una acción de gobierno.»

 

Así las cosas ¿cuál es el proemio (signifique ello lo que signifique) que guía el proyecto futbolístico de Florentino? El proyecto empresarial ya lo conocemos: cambiar ladrillos por las botas y los caretos más ilustres y conocidos del concierto internacional. Pero ¿y el proyecto deportivo? Porque un proyecto deportivo, más allá de los jugadores, lo hace triunfar la cabeza pensante que los dirige, como Guardiola ha demostrado en apenas un año; o lo hunde irremediablemente una cara bonita con traje de Armani, como Queiroz acreditó en su momento.

 

Sin entrar en que, de momento, ni una palabra se ha escuchado sobre el baloncesto, el hermano tonto del club blanco.

 

Fíjense en las portadas de hoy de los diarios deportivos madrileños. ¿Caben dos proyectos más antagónicos entre sí, ambos ligados al mismo Florentino?

 

La otra noche, en el debate de El Larguero, se planteaba la posibilidad de que Valdano se dejara de cuentos y ocupara el banquillo de la Casa Blanca. A mí, personalmente, siempre me gustó Valdano, desde que leí sus «Cuentos de fútbol» y el Tenerife nos quitara dos ligas. Con un par.

 

¿Se habrán agotado las ideas de Jorge? Como comentarista de La Sexta, su sapiencia palidece ante las excentricidades de Montes y la bullanguera nadería de Salinas. ¿Le quedan neuronas y capacidad para gestionar el nuevo sueño de la Sábana Blanca, que no Santa?

 

Porque, y esto lo escribo de cara al miércoles, esta semana seré blaugrana. Sí. Por amor a la estética y a la justicia poética. Jamás pensé que podría querer que el Barça ganara un partido, una competición, una Liga de Campeones. Pero sí. Este miércoles, cuando el Barcelona y el Manchester United diriman la finalísima de la Champions, gritaré alborozado los goles de los Etoo, Messi, Henry o, sobre todo, los de Iniesta o Xavi.

 

Envía Pere Sureda a La Parida de Andreu Martín, las siguientes palabras:

 

«DOS HOJAS DEL TREBOL

 

      «La victoria queda en los libros,

 

      pero la forma

 

      de conseguirla queda

 

      en la cabeza

 

      y en el corazón de la gente»

 

(ARRIGO SACCHI.)

 

Y ahora a conseguir el trébol en Roma el día 27, con nuestro estilo. No sabemos hacerlo de otra forma.»

 

Las suscribo como propias y, estupefacto ante las elecciones para la Casa Blanca, echando de menos a un Obama que nos conquiste con su proyecto sereno y la esperanza de su discurso, cierro este texto con un grito que, como madridista convicto y confeso, reconozco que me rechina… pero que no me puedo dejar dentro, aún a riesgo de que me caigan mojicones a diestra y siniestra:

 

¡Visca el Barça!

 

Jesús Lens, increíble y semanalmente blaugrana.