Comencemos por una pregunta aparentemente sencilla, pero cargada de significación. ¿Para usted es descentralización o descapitalización? A la idea de sacar fuera de Madrid diversas entidades públicas me refiero.
Me da a mí que este va a ser un debate estéril, como el del cambio de hora o el trasvase de festivos a los lunes para evitar puentes como este del Pilar: para unos ha sido un todo un acueducto durante el que han podido viajar, aprender y pasarlo teta mientras que para otros fue una preciosa pérdida de tiempo, que el lunes resultó inhábil e inútil en muchos frentes y sentidos.
De Madrid no va a salir nada. Al menos, yo no aspiro a verlo con estos ojitos cada vez más fatigados y neblinosos. Pero la idea es interesante para fabular, soñar e imaginar. Desde que tengo uso de razón, los que mandan se concentraban en dos sitios: Madrid y Sevilla. Y punto pelota. Después llegaron Bruselas y Estrasburgo, pero esa es otra historia, a la espera de lo que pase con el jinete polaco.
Los centros decisorios del 90% de lo que pasa en nuestra vida están centralizados en dos lugares que son algo más que dos ciudades. De ahí la metafórica inquina que algunos les tienen a Madrid y Sevilla como concepto. Que no a sus barrios, vecinos, bares y monumentos. En las consejerías, ministerios, agencias y secretarías es donde se parte el bacalao. Aquí no se mueve un papel ni se autoriza una firma sin que tenga la aprobación de los superiores jerárquicos afincados a orillas del Guadalquivir y del Manzanares.
Por todo ello me parece justa y equitativa la descentralización de entidades públicas, la peyorativamente llamada ‘descapitalización’. En los tiempos de internet, el teletrabajo, zoom y el AVE; que el Tribunal Constitucional estuviera en Cádiz sería una delicia. Máxime porque sus señorías serían mucho más conscientes de lo que supone vivir en provincias. La movilidad y la frecuencia de los trenes, sin ir más lejos.
Así las cosas y dejándole el Senado a Barcelona, para Granada yo me pediría el Instituto Cervantes. ¿No sería bonito que tuviera su sede aquí? De cara a la candidatura de la capitalidad cultural del 2031 sería un puntazo.
Y puestos a pedir, como Granada también es Ciudad de la Ciencia, no estaría de más reivindicar el CSIC, la agencia estatal para la investigación científica y el desarrollo tecnológico. Dado el buen papel que desempeña el Instituto Andaluz de Astrofísica, lo del CSIC sería un éxito garantizado. ¿Será por pedir?
Jesús Lens