Piensa en negro

Piensa en negro y acertarás. Think’Noir. Siéntelo. Vívelo. Disfrútalo. Desde el pasado jueves he pasado en mi casa el tiempo justo para ducharme, cambiarme de ropa, dormir un escaso puñado de horas y salir zumbando. Se me ha enmohecido la comida en el frigorífico y la adrenalina no deja de fluir por mi cuerpo, las 24 horas del día. ¿Saben ustedes el gustazo, el subidón que es eso?

Estos días estamos disfrutando de la presencia en nuestra ciudad de una pléyade de creadores que nos están inyectando vitalidad y creatividad, a raudales y en vena. ¿Qué voy a decir yo, si soy el director de Granada Noir, la locura que puse en marcha hace tres años, de la mano del imprescindible Gustavo Gómez y sin cuya agencia, Acento Comunicación, todo esto sería imposible?

 

No puedo ser objetivo, pero lo veo en la cara de la gente, lo escucho en los corrillos que se forman al terminar los actos, en la expresión de las personas que nos acompañan en los Encuentros Cerveza Alhambra Especial, tomando una birra y disfrutando de una rica tapa.

Las acaloradas discusiones sobre qué es ser una heroína hoy y sobre si debe haber mesas literarias con presencia exclusivamente femenina, el disfrute de contemplación de las ilustraciones del proyecto Hnegra, los cientos de personas que se arremolinaron en torno a la Potato Head Jazz Band en Puerta Real; la emoción de conocer la dramática historia de la Alhambra subterránea, negra y dramática, que convierte a “Juego de tronos” en juego de niños…

 

En Granada Noir hemos interrogado, hasta el ensañamiento, a uno de los más grandes artistas granadinos de la historia: Juanjo Guarnido, al que damos la enhorabuena por su ingreso en la Academia de Bellas Artes. Hemos sido testigos del encuentro, ¡por fin!, entre Federico García Lorca y Agustín Penón, gracias al magisterio y a la imaginación de Enrique Bonet, Juanfran Cabrera, Fernando Marías y un Alejandro Pedregosa que, un lunes por la noche, nos deleitó con un sentido recital de poesía sangrante en la que refulge el acero de las navajas.

Todavía nos queda más de la mitad de Granada Noir: películas por ver, cineastas a los que conocer, escritores a los que escuchar, investigadores de los que aprender, libros por compra, música con la que bailar… ¿Nos acompañan? Porque el auténtico crimen sería perdérselo…

 

Jesús Lens

Lorca como personaje literario, la ilustración y la poesía criminal protagonizan el lunes de Granada Noir

En la jornada de Granada Noir que se desarrolla en la Diputación de Granada, los novelistas Fernando Marías y Alejandro Pedregosa y los guionistas e ilustradores Enrique Bonet y Juanfran Cabrera hablarán de por qué han elegido a Lorca como personaje literario  

 

En ErranT, duelo de ilustradores, dibujando en vivo sobre el cristal

 

El Encuentro Cerveza Alhambra Especial de la jornada acogerá en el bar La Goma un recital de poesía Noir de Alejandro Pedregosa

 

Domingo, 1 de octubre de 2017

La jornada del lunes de Granada Noir se desarrolla en el Palacio de los Condes de Gabia principalmente, centro neurálgico de Diputación de Granada en su vertiente artística y cultural. La jornada comenzará a las 18 horas, con la proyección del documental “Lorca, memorias de un poeta”.

 

A las 19 horas, en el mismo Palacio de los Condes de Gabia, una interesante mesa redonda, presentada por la diputada de cultura, Fátima Gómez Abad, en la que se hablará de Lorca como personaje literario. La conversación correrá a cargo de dos novelistas, Fernando Marías y Alejandro Pedregosa, y de dos guionistas e ilustradores, Enrique Bonet y Juanfran Cabrera.

En “La luz prodigiosa”, primera novela de Fernando Marías, posteriormente adaptada al cine, el escritor fabula con la posibilidad de que Lorca no hubiera muerto tras su fusilamiento a manos de los sublevados fascistas y que, insomne y perturbado por el balazo recibido, deambulaba por las calles de Granada.

 

Alejandro Pedregosa, por su parte, está ultimando una novela en la que fabula con la improbable, aunque no imposible idea, de que Federico García Lorca y Kafka hubieran coincidido en algún momento de su vida. Una novela cuya escritura, Pedregosa avanzó durante su estancia en Praga, gracias a una beca promovida por Granada Ciudad de Literatura UNESCO.

 

Enrique Bonet es el autor de “La araña del olvido”, un libro prodigioso en que se cuenta la investigación llevada a cabo por Agustín Penón sobre la muerte de Lorca, en la Granada de los 50. Se trata de un tebeo prodigioso que, en la tercera edición de Granada Noir, ha sido el obsequio que el festival ha hecho a los autores invitados, además de que la imagen de Penón protagoniza el cartel de GRN3, gracias a la generosidad de Bonet para con el festival.

Y Juanfran Cabrera, junto a Javierre, están embarcados en un proyecto imaginativo, irreverente y divertidísimo: “Los caballeros de la Orden de Toledo”, una serie de cómics, del que ya está ultimando la quinta entrega en la que se cuenta la vida de Lorca en la Residencia de Estudiantes y las trapisondas que organizaba junto a Dalí, Buñuel, Pepín Bello y otros piezas por el estilo.

 

Para Jesús Lens, director de Granada Noir, “reivindicar la figura de Lorca como fuente de historia y fabulación para novelas, guiones y tebeos es contribuir a expandir el alcance de una figura universal al que, afortunadamente, podemos acercarnos desde mil y un ángulos y disciplinas diferentes”, tal y como explicaba en unas reflexiones publicadas hace unos meses: Lorca, fuente de inspiración del Noir y que se puede leer a través del siguiente enlace, con referencias a todos los participantes en la mesa redonda de mañana lunes en Diputación:

 

https://www.granadablogs.com/pateandoelmundo/lorca-fuente-de-inspiracion-noir/

 

Tras la charla, a las 20.30 horas, el espacio de Coworking ErranT acogerá un encuentro creativo muy estimulante: Agustín Penón y Federico García Lorca podrán encontrarse por fin, gracias al talento de Juanfran Cabrera y Enrique Bonet, que dibujarán en vivo y en directo sobre las cristaleras de ErranT.

Encuentro Cerveza Alhambra Especial

 

La velada del lunes terminará a las 22 horas en el Bar La Goma (C/Gracia, 40) con el Encuentro Cerveza Alhambra Especial que contará con el propio Alejandro Pedregosa, reconocido poeta además de novelista y cuentista, que protagonizará un recital de poesía muy especial: los grandes crímenes en la historia de la poesía.

 

“Los crímenes líricos, podríamos decir, -señala Pedregosa-. Se puede hacer un recorrido tan interesante como Noir. Por ejemplo, podemos repasar los siguientes episodios: La Odisea y la matanza de los pretendientes; el Romancero tradicional castellano y la  historia de aquel noble adultero al que meten vivo en un ataúd junto a una compañía poco recomendable, los Cantares de Ciego que iban de pueblo en pueblo relatando los asesinatos de la época, Antonio Machado y la tierra de Alvargonzález, romances de Lorca, la milonga de los dos hermanos de Borges… y es que, como podemos ver, la poesía no tiene que ser solo bucólico pastoril”, concluye Pedregosa con un guiño pícaro e irónico.

 

El Encuentro Cerveza Alhambra Especial transcurrirá entre poesía, cañas, tercios… y la explosiva Tapa Noir diseñada por el local: Cabeza Montalbano, en recuerdo del comisario siciliano Montalbano y su pasión por los pimientos y la pasta. El nombre de la tapa viene inspirado por simular una cabeza cortada donde podemos ver los sesos.

 

Toda la información sobre los invitados al Granada Noir y el programa de actividades, día por día, la tenéis en www.granadanoir.com y, aquí, un completo dossier de prensa sobre el festival:

 

http://granadanoir.com/wp-content/uploads/2017/09/Dossier-de-Prensa-de-GRN3.pdf

 

 

 

Desolación y rabia

A las 12 del mediodía me tocaba presentar una charla entre Carlos Salem y Agustín Martínez en el Cuarto Real. Una de las conversaciones de Granada Noir. Y comencé diciendo que era extraño estar ahí, hablando de literatura, con lo que estaba pasando allá.

La ansiedad, tensión y estrés que conlleva organizar un festival hace que los nervios me despierten temprano. Domingo. 9 am. En el campo de fútbol de cerca de mi casa, en el Zaidín, hay un partido de fútbol. Escucho las voces de los entrenadores gritándoles consignas a los espectadores, el silbato del árbitro, las exclamaciones de los espectadores.

 

Pongo la radio. Allá abren los colegios electorales. O no. Los periodistas hablan de zarandeos, de personas arrastradas por el suelo, de tensión. De violencia.

 

Mediodía. Comemos en el Realejo, diez escritores de novela negra. La televisión, sin sonido, muestra imágenes dolorosas, trágicas, terribles. Hablamos de literatura, de viajes, de cine, de series de televisión, de proyectos creativos. Y todo ello me parece más cercano que lo que está pasando allá.

 

¿Por qué aquí y allá, de pronto, son dos lugares tan alejados? Sí. Es cierto. No ha sido de pronto. Lo que ocurrió ayer se ha venido fraguando a lo largo de los años, una mezcolanza de emociones que nos han desbordado a todos.

A estas alturas, en el reparto de culpas y responsabilidades, se mezclan la pasión nacionalista, la abulia y la apatía de una inmensa mayoría de gente con el odio y el desprecio de unos pocos. El hartazgo y el aburrimiento frente a la emoción a flor de piel.

 

¿Qué hemos hecho tan mal, todos, para que hoy hablemos de aquí y allá como lugares tan diferentes y alejados, humana y emocionalmente?

 

Nunca he sido proclive a la asunción de responsabilidades colectivas. Siempre me ha parecido una excusa cobarde para enmascarar cuestionables comportamientos individuales. Pero después de escuchar, ver y leer todo lo que ha pasado en Cataluña el domingo 1 de octubre, es necesario que reflexionemos sobre cómo hemos llegado a este punto de fractura. Para tratar, en la medida de lo posible, de restañar heridas y tender puentes sólidos y duraderos.

 

Sé que decir esto y no decir nada es exactamente igual. Pero es que, en estos momentos, no tengo palabras. Solo siento una enorme impotencia paralizante que me llena de desolación y rabia.

 

Jesús Lens

El periodismo en clave Noir

Tengo muchas ganas de preguntarle esta tarde a Quico Chirino si la novela negra le sirve para ir más allá de su actividad periodística o si mantiene separadas ambas facetas. Porque hoy miércoles, a las 20 horas, se presenta en el Cuarto Real de Santo Domingo su excelente “A la izquierda del padre”, publicada por Samarcanda. Y será uno de los temas que pongamos encima de la mesa. Aprovechen para leer la excelente entrevista que Pablo Rodríguez hace a Quico Chirino en IDEAL.

También tengo mucha curiosidad por saber qué opina Eduardo Peralta, director de IDEAL, sobre una novela muy negra en la que uno de los protagonistas es, precisamente, un periodista.

 

De hecho, era tanta la curiosidad que me suscitaba el tema que me he lanzado a interrogar a Quico Chirino, por adelantado. Y esto me dice: “En mi caso, mi novela poco tiene que ver con mi labor periodística habitual, aunque que está reflejada parte de mi experiencia como reportero en mis primeros años. En cambio, sí aprovecho la novela para reflexionar sobre el periodismo y a mis personajes para que digan cosas que en mí no resultarían políticamente correctas. Pienso que mi narración tiene mucho de crónica, o eso pretendo, y en la forma de documentarme sí se percibe mi labor periodística”.

Foto: FERMIN RODRIGUEZ. Quico Chirino, Periodista y escritor

Una respuesta muy interesante que abre caminos y me anima a ampliar el espectro de autores interrogados sobre la cuestión. Porque en la tercera edición de Granada Noir vamos a tener una mesa redonda, presumo que apasionante, con algunos periodistas que, más allá de su labor informativa e investigadora, escriben y publican género negro.

 

Por ejemplo, Javier Valenzuela, autor de “Limones negros”, publicada por Anantes y de la que ya hablamos en esta sección. Y que nos dice lo siguiente: “La novela negra es, desde su nacimiento, un modo excelente de contar con espíritu crítico la realidad del mundo capitalista. Lamentablemente, la creciente censura que hoy ejercen los poderes políticos y económicos sobre el periodismo hace que muchos profesionales tengamos que recurrir hoy más que nunca a la coartada de la ficción literaria para sacar a la luz cosas que sabemos que son ciertas”.

¿Es o no es un excelente punto de partida para una conversación sobre periodismo y literatura policíaca? En ese sentido, es muy interesante la opinión tanto de Quico Chirino como de Valenzuela sobre por qué han elegido este género para contar sus historias.

 

Nos dice Chirino: “Yo he querido hacer una crónica social, apoyado en la ficción. Y sucede que si te acercas a la realidad y la recoges sin aderezos es muy probable que te salga una novela negra. Como escritor no quiero ser políticamente correcto. Por eso, en mis escenarios, en los ambientes marginales que recreo, hay droga, quinquis y ratas que muerden a los niños en la cabeza. No solo flamenquitos y mucho arte; que también son una parte de la realidad, pero esa la dejo para otros escritores”.

 

Javier Valenzuela, por su parte, abunda en el mismo sentido: “Empecé a ejercer el oficio de periodista porque hacía posible que me pagaran por tres cosas que siempre me han encantado: escribir, viajar y combatir las injusticias. En “El País” debuté como cronista de sucesos en el Madrid de los años quinquis y luego fui corresponsal de guerra en Beirut, Teherán, Sarajevo y otros lugares, así que terminar escribiendo novela negra me parece un colofón de mi carrera bastante lógico. Por lo demás, ya leía a Hammett, Chandler y compañía hace cuarenta años, no tuve que esperar la llegada de los escandinavos para pensar que este es el género literario más crítico, realista y entretenido de nuestro tiempo”.

 

Como ven, no les falta retranca, humor e ironía a ninguno a unos Quico y Javier que compartirán conversación, en la última mesa redonda de #GRN3, el sábado 7 de octubre (*), con otros dos pesos pesados del periodismo español: Mariano Sánchez Soler e Íñigo Domínguez, autor de una impresionantes e imprescindibles “Crónicas de la mafia”, publicada por Libros del K.O.

Mariano Sánchez Soler, periodista y escritor de raza, autor de “El asesinato de los marqueses de Urbina”, Premio L’H Confidencial de 2013 y publicada por Roca Editorial, nos explica que “mis libros no tendrían sentido si no fueran instrumentos de conocimiento, de revelación. No escribo historias tan oscuras porque me diviertan. Si quisiera escribir novelas adaptadas al consumo literario tendría que ir por caminos distintos que no me interesan absolutamente nada. A mis 59 años, me considero un escritor radical; sigo escribiendo sobre lo que me gustaría leer y con ello trato de responder a la realidad que me ha tocado en suerte. La escritura es para mí una actividad total en la que cabe el periodismo, el ensayo, la narrativa, la poesía, etcétera. Son distintas parcelas de una única posición ante el mundo y la vida… Desde el punto de vista profesional, soy un cronista, un narrador, un periodista literario. Uso la palabra escrita como herramienta absoluta”.

Y sobre su método de interrelacionar periodismo y literatura, Mariano Sánchez Soler es igual de contundente y radical: “Ningún tema está escrito. Somos narradores de un tiempo en ebullición. Ficción y realidad se funden en mis libros. La creación ha sido siempre como un péndulo. Cuando la investigación periodística no llegaba hasta sus últimas consecuencias, en vez de conformarme y pasar a otra cosa, utilizaba esos materiales para escribir ficciones en las que construía la historia que podría haber escrito si hubiera conseguido los datos precisos, o si hubiera demostrado los hechos que buscaba en mi investigación”.

¿Dónde están los límites entre el periodismo y la literatura? ¿Dónde termina uno y comienza la otra? De todo eso y de mucho más empezaremos a conocer esta tarde, en la charla con Quico Chirino y Eduardo Peralta. Y, desde el 29 de septiembre, en Granada Noir.

 

Ya saben: el crimen sería perdérselo…

 

En la web www.granadanoir.com pueden consultar el programa completo de #GRN3.

 

Jesús Lens

Granada Noir colabora en la publicación de la biografía definitiva de Raymond Chandler

Granada Noir, festival patrocinado por Cervezas Alhambra, en colaboración con otros festivales de género de toda España, ha contribuido a la publicación de “La vida de Raymond Chandler”, de Frank MacShane, publicado por la editorial Alrevés y considerado por la crítica internacional como la biografía definitiva de uno de los padres del género negro

 

Granada Noir ha hecho entrega de veinte ejemplares de “La vida de Raymond Chandler” a las bibliotecas de Granada y a diversos Clubes de Lectura que colaboran con el festival   

 

“Uno de los objetivos que debe perseguir un festival cultural dedicado al género negro es contribuir a la difusión y el conocimiento de ensayos, estudios y obras teóricas especializadas en el Noir. Cuando de la editorial Alrevés nos propusieron colaborar económicamente para la publicación de la biografía de Raymond Chandler de Frank Macshane, no lo dudamos y dimos el sí quiero de forma inmediata”.

 

Así explican Gustavo Gómez y Jesús Lens, directores de Granada Noir, cómo decidieron participar en una iniciativa pionera en España: la unión entre varios festivales dedicados al género negro para posibilitar la publicación de un título imprescindible para los amantes del Noir: “La vida de Raymond Chandler”, de Frank MacShane.

 

“Que la propuesta viniera de Alrevés, una de las editoriales españolas que mejor catálogo especializado en género negro tiene en España y que con más decisión está apostando por autores jóvenes con propuestas originales y diferentes; era suficiente aval para subirnos a este tren. Que en dicha iniciativa colaboren Pamplona Negra, Getafe Negro, Las Casas Ahorcadas, el Congreso de Novela y Cine Negro de Salamanca y Valencia Negra; citas con las que Granada Noir comparte una misma filosofía; es buena prueba de la utilidad y de la vocación por la difusión de la cultura de los festivales de género negro”, señalan Gustavo Gómez y Jesús Lens.

 

Entrega de libros a las Bibliotecas y Clubes de Lectura de Granada

 

Ayer por la tarde, en un encuentro celebrado en el Restaurante Ácimo y con la colaboración de Cervezas Alhambra, los directores de Granada Noir hicieron entrega de veinte ejemplares de “La vida de Raymond Chandler”, de Frank MacShane, a las Bibliotecas de Granada y a los Clubes de Lectura que colaboran con el Festival.

En palabras de Margarita Buet Solano, responsable del Club de Lectura de la Alianza Francesa de Granada: “El hecho de que los participantes en distintos clubs de lectura de la provincia nos podamos reunir periódicamente genera una química especial hacia el festival y alienta mucho a la gente. Además, que un festival cultural como Granada Noir contribuya a la publicación de un libro tan interesante como es la biografía de Raymond Chandler y tenga el detalle de regalar veinte ejemplares a bibliotecas públicas y clubes de lectura, le prestigia enormemente”.

 

Actualmente, colaboran con Granada Noir diferentes clubes de lectura de la provincia de Granada como Té & Libros, que se reúne en la librería Ubú libros, Fundación Euroárabe, el Club Sueca, Alianza Francesa de Granada y Biblioteca Municipal de Vegas del Genil.

 

La vida de Raymond Chandler

 

Raymond Chandler fue, junto con Dashiell Hammett, el renovador y el maestro indiscutido del género policiaco. Sus siete novelas tienen una categoría literaria sorprendente en un campo en el que nadie, hasta aquel momento, esperaba calidad. Y es que Chandler era, ante todo, un escritor inteligente.

Despedido de su empleo como ejecutivo de una compañía petrolera por su afición a la bebida, el hombre que reveló el lado oscuro de la opulenta sociedad californiana en novelas como El sueño eterno, La ventana siniestra y El largo adiós no empezó a escribir hasta los cuarenta y cuatro años. Poco tiempo después, el detective Philip Marlowe, héroe de sus novelas, había conquistado al público de todo el mundo.

 

Pero Chandler no se dejó seducir por el éxito: junto con su esposa Cissy —casi veinte años mayor que él— llevó una vida de insólito aislamiento. Por ello, porque muy poco se había sabido de Chandler hasta el momento, es especialmente interesante el estudio de Frank MacShane, basado en el testimonio de quienes conocieron al gran escritor, en su correspondencia y en sus textos inéditos.

 

Frank MacShane (1929-1999) cursó estudios universitarios en Harvard, obtuvo un máster en Yale y un doctorado en Oxford en 1955. Fue profesor en Hotchkiss School, en Vassar College, en la Universidad de California en Berkeley y en Williams College. En 1967 fundó el Departamento de posgrado de escritura creativa en la Universidad de Columbia y es ampliamente reconocido como uno de los primeros académicos en estudiar Raymond Chandler y su obra. Para MacShane, Raymond Chandler era más que un escritor de misterio y novela negra, ya que marcó un estilo literario propio y fue un gran observador del estilo de vida norteamericano.

 

El Festival Granada Noir

 

Granada Noir es un festival multidisciplinar de carácter popular dedicado al género negro y policíaco, puesto en marcha en 2015 por Gustavo Gómez y Jesús Lens y que cuenta con el patrocinio de Cervezas Alhambra y la colaboración de Diputación de Granada, CAJAGRANADA Fundación, la Alianza Francesa de Granada, El Corte Inglés, Consejería de Cultura, Turismo y Deportes de la Junta de Andalucía y Ayuntamiento de Granada a través de su programa Granada Ciudad de Literatura UNESCO, además de otras empresas, comercios y particulares.

GRN es un festival que promueve un variado maridaje de propuestas culturales de calidad contrastada; una cita de carácter abierto, creador, innovador, participativo y gratuito, que saca la cultura a la calle, a los barrios y a los pueblos y que, además, la lleva a bares, bibliotecas, clubes, cines y cafés.

 

Un festival cuyo programa está abierto a todas las artes y que permite maridar las disciplinas más diferentes, posibilitando el contacto y la relación directa entre autores, creadores, público y aficionados.