¡Bienvenido!

¿Qué buscaba este buen muchacho? ¿Qué le llevó a saltar del avión? ¿Lo hizo voluntariamente o se vio obligado por las circunstancias? ¿No había otro sitio en el que aterrizar? Decía la canción que la vida te da sorpresas. Y que sorpresas te da la vida…

 

No le arrendamos las ganancias a este individuo, dada su clarividencia, aunque adrenalina, la va a soltar. ¡A chorros!

 

Jesús adrenalínico Lens

Dejarse llevar

Me gusta esta imagen. ¿Habrán remado por encima de sus posibilidades estos aguerridos muchachos? O será que se han dejado llevar por la algarabía provocada por la gran catarata… ¿Quizás se han ebmarcado en una quimera demasiado ambiciosa? O, lo mismo, es que sencillamente se dejaron llevar por la corriente hasta un punto excesivamente peligroso. Lo que conocemos como el punto de no retorno.

Así las cosas, la pregunta no es tanto cómo hemos llegado hasta aquí, sino qué hacemos para remontar la corriente y no terminar por precipitarnos al abismo. Salvo que nos gusten las emociones fuertes, claro. Que tampoco habría que descartarlo, viendo determinadas actitudes.

 

Jesús gráfico Lens

Bienvenida

Como imagen de bienvenida a Ángela, creo que ésta es muy ilustrativa: la mano de pedir que queda después de haber practicado una exigente y concienzudo programa de recortes, en el que no se ha escatimado nada. De nada. Y menos aun.

¡Dame algo! (Si algo queda)

¡Bienvenida, Ángela!

Y si la idea es echarnos una mano, que no sea un despjo. Y que no vaya al cuello, de ser posible…

Jesús despojado Lens