Le había pedido Claudio, el librero de Atlántida, “Pero hermoso. Un libro de jazz”, de Geoff Dyer y, mientras fue a buscarlo, lo vi. En realidad, era él el que me miraba con displicencia, desde lo más alto de un anaquel que estaba en lo más alto de la parte más alta de la librería. Me miraba, además, esquinado: apenas podía vislumbrar la parte de debajo de la trompeta junto al zapato, que preside la portada.
- ¿Me dejas ver ese libro que tienes ahí?
“Un blues mestizo”. Esi Edugyan. Editorial Alba. Colección Contemporánea.
Aunque, de antemano, sabía que me lo iba a llevar, le di la vuelta y miré la contraportada: “París, 1940. Los nazis, que acaban de invadir la ciudad, detienen en un café a un extraordinario trompetista de jazz. Se llama Hiero, tiene veinte años y es ciudadano alemán y de raza negra. Nunca más se supo de él”.
Suficiente, ¿no crees?
No recuerdo qué título andaba leyendo cuando me hice con esta joya, pero sí sé que aceleré su lectura al máximo para poder concentrarme en una historia que trascurre en dos épocas distintas y distantes, pero protagonizadas por los mismos personajes: los años inmediatamente anteriores a la II Guerra Mundial y el final de los años 80, cuando cayó el Muro de Berlín.
Inciso: digo que la novela está protagonizada por los mismos personajes porque tienen los mismos nombres. Pero, por supuesto, son radicalmente distintos. Porque no se puede ser uno y el mismo cuando se tienen 20 años que cuando se tienen 70, ¿verdad? Al menos, no se debería…
Esta es una novela IMPRESICINDIBLE para todos los amantes de la música en general y del jazz en particular. Pero, por supuesto, también es una novela INDISPENSABLE para cualquier persona con buen gusto por las historias bien trenzadas, por los personajes poliédricos y repletos de matices, por las relaciones complicadas y por la narrativa histórica en la que el tiempo y el espacio están al servicio de la trama, y no al contrario.
Una novela protagonizada por un grupo de músicos que, con sus grandezas y sus miserias a cuestas, son hijos de una época compleja y tempestuosa, de unas circunstancias terribles que obligaban a sacar lo mejor de uno mismo, pero que también permitían que se enseñorease lo peor de cada casa: el racismo, la envidia, la violencia, los prejuicios…
Y está la música. Siempre la música. Hasta en las peores circunstancias. Y la posibilidad de grabar un disco con uno de los grandes. Con el mejor, de hecho: Louis Armstrong, afincado temporalmente en aquella Europa de entreguerras.
¿Hay lugar para la música cuando el mundo se asoma al abismo? ¿Y para la amistad? ¿Hasta dónde se puede llegar para conseguir la libertad? ¿Y el prestigio y el reconocimiento musicales? Y el amor, claro. Que también hay una historia de amor fou. Uno de esos amores abocados a la tragedia y a la desesperación, por supuesto.
No me extraña que esta excelente novela de la autora canadienses Esi Edugyan se haya hecho acreedora de diferentes premios y reconocimientos literarios, incluyendo ser finalista del prestigioso Man Booker Prize. Una escritora a la que, a partir de ahora, seguiremos la pista bien de cerca.
Jesús Lens