Belén Ortega y Millenium

No quiero empezar esta entrega del Rincón Oscuro, la sección semanal que dedicamos a la cultura negra y criminal, de forma nostalgiosa y milonguera, pero… ¡qué noches las de aquellos días, cuando nos íbamos a la cama en compañía de las novelas de Stieg Larsson, con Lisbeth Salander y Mickael Blomkvist!

Los amantes del Noir le debemos tanto, tantísimo, a la saga ‘Millenium’… De ahí parte la explosión definitiva del género, su extensión y popularización. ¿Se acuerdan de aquella fiebre lectora, cuando las aventuras de la hacker antisistema y del periodista contestatario capitalizaban las conversaciones de medio mundo y los autobuses y las cafeterías se llenaron de lectores que portaban, orgullosos, los gruesos tochos negros editados por Destino?

Pues ahora tenemos la oportunidad de rememorar y revivir el fenómeno Millenium, en formato cómic, gracias a los tres tomos publicados por Norma Editorial, escritos por el guionista francés Sylvain Runberg y, ojo al dato, dibujados por la extraordinaria artista granadina Belén Ortega.

Una de las herramientas que nos ofrece Facebook es la creación de álbumes de fotos, recurso que utilizo para ir comentando de forma tan ordenada como informal las películas que veo y los libros y cómics que voy leyendo. Una herramienta que me sirve como bitácora fílmico-literaria y que me permite, también, dialogar y debatir con los amigos.

Cuando comenté mis impresiones sobre el primer álbum de esta nueva saga basada en el universo Millenium, ‘Las almas frías’, decía que el dibujo de Belén estaba por encima del guion de Sylvain, que me había parecido un poco caótico y deslavazado, abriendo diferentes líneas argumentales que no sabía a dónde iban a ir a parar. Belén no dudó en reconvenirme, pidiéndome paciencia y alabando el trabajo literario de su guionista.

Efectivamente, la lectura de la segunda entrega de la serie, ‘Los nuevos espartanos’, empezaba a poner orden en las tramas, reconduciéndolas todas ellas hacia un desenlace espectacular, que acaba de llegar a las librerías y que se titula ‘La chica que nunca se daba por vencida’, recuperando la querencia de Larsson por los títulos largos, combativos y cargados de significado, de ‘Los hombres que no aman a las mujeres’ a ‘La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina’.

En esta nueva inmersión en el universo ‘Millenium’, Sylvain Runberg y Belén Ortega nos cuentan varias historias que, de tan actuales, de tan pegadas a la realidad, resultan inquietantes. Aunque no voy a hacer ningún spoiler, si a ustedes les gusta enfrentarse a los libros, los cómics, las series y las películas completamente vírgenes, pueden saltarse los próximos tres párrafos de este texto.

En estos tres tebeos, los autores nos cuentan historias sobre racismo y misoginia. Y sobre la eclosión de la extrema derecha en Europa y Estados Unidos, un fenómeno alarmante que copa la actualidad informativa de estos días. Por ejemplo, ¿sabían ustedes que en Finlandia estuvo a punto, a puntísimo de ganar las pasadas elecciones un partido llamado ‘Verdaderos finlandeses’? A dos décimas se quedaron de derrotar a la socialdemocracia en los comicios de hace dos semanas.

En la Saga Millenium publicada por Norma también aparecen hackers, por supuesto. Piratas informáticos que hacen equilibrios en la delgada línea roja que separa la lucha libertaria por la verdad con la puesta en jaque de nuestros sistemas democráticos, abriendo un interesante debate que obliga al lector a reflexionar. Y a tomar partido.

Y están los sistemas de escucha masiva y espionaje impulsados por los gobiernos, el papel de la prensa libre y la presión comercial de los anunciantes, el feminismo y, enfrentado a él, el machismo recalcitrante al que no se le cae el término ‘feminazi’ de la boca; las criptomonedas utilizadas para blanquear dinero de origen dudoso…

Háganse con los tres tomos de la Saga Millenium en formato cómic. 200 páginas de adrenalina pura que recuperan el espíritu de Stieg Larsson para contar historias de aquí y ahora, radicalmente contemporáneas y de rabiosa actualidad.

Van ustedes a disfrutar, otra vez, de dos personajes míticos de la historia de la literatura de este siglo: Lisbeth Salander y Mickael Blomkvist, protagonizando tramas y aventuras contemporáneas de acuerdo con el espíritu y la filosofía de su creador original.

¡Qué grande fue Larsson! Y qué gustazo, para los aficionados, que su obra haya alcanzado una dimensión universal y transmedia, protagonizando novelas, películas, series de televisión, cómics y, de nuevo, trabajos de investigación periodística como ‘Stieg Larsson. El legado’, que acaba de publicar Roca Editorial. Un libro en el que el también periodista y escritor sueco Jan Stocklasa cuenta cómo es posible que el autor de ‘Millenium’ hubiera desentrañado todos los datos necesarios para resolver el misterioso asesinato de Olof Palme.

Termino con otra recomendación: como la lectura del cómic es adictiva y al lector le resulta obligatorio avanzar a toda velocidad para conocer el desenlace de las tramas, léanlo dos veces. La primera, de forma salvaje y compulsiva. La segunda, de forma morosa y tranquila, disfrutando con sosiego del extraordinario trabajo artístico de Belén Ortega en la composición de cada viñeta, que es una gozada.

Jesús Lens

Y la saga continúa…

Vuelve Carvalho. ¡Normal que un notición de ese calado se convirtiera en Trending Topic y que abriera las secciones culturales de los medios de comunicación! Menos impacto mediático tuvo, sin embargo, otro regreso muy especial. Y es que también vuelve Méndez, el atípico policía creado por el inmortal Francisco González Ledesma. En unas semanas llegará a las librerías “Llámame Méndez”, novela publicada por Planeta y escrita por Victoria González Torralba, periodista de profesión e hija del Jefe de la Banda, como se conocía a FGL entre los aficionados al Noir.

En este caso, la nueva historia protagonizada por Ricardo Méndez será una precuela que nos llevará a la Barcelona de posguerra, allá por los años 40 del pasado siglo. Y Méndez no estará todavía de vuelta de todo, que solo contará con 17 añitos de edad.

 

Para Victoria, volver al personaje de Méndez ha sido algo casi natural, dado que ya ayudó a su padre con el final de la última novela protagonizada por ese policía tan insobornable como negado para las nuevas tecnologías, “Peores maneras de morir”. De hecho, Victoria había comenzado a escribirlo antes del fallecimiento de FGL, a modo de homenaje a los años de formación de su padre, en aquella España gris, oscura y desangelada.

Vuelve Méndez y vuelve Carvalho. ¡Claro que sí! Y no porque se haya encontrado, escondido en un cajón, un misterioso manuscrito con una novela inédita de Manuel Vázquez Montalbán, sino que lo hará de la mano de otro autor que ama, vive, conoce y escribe la ciudad de Barcelona: Carlos Zanón.

 

Pocas decisiones tan acertadas como la de poner en manos de Zanón a uno de los personajes más reconocidos de la literatura española de los últimos cuarenta años. Y es que el autor nacido en Barcelona en 1966 y cuya novela “Yo fui Johnny Thunders” arrasó con todos los premios del 2015, es el más indicado para actualizar al personaje de Carvalho.

De momento, apenas ha trascendido nada sobre la nueva aventura carvalhiana: que la trama se desarrollará en la Barcelona contemporánea de la que es alcaldesa Ada Colau, que el detective seguirá quemando libros en sus ratos libres y que, de momento, no tiene cuenta en Instagram para compartir esos platos a los que su Yo-gourmet es tan aficionado.

 

Por todo ello, y a la espera de que regrese Méndez, el próximo marzo y de que febrero de 2018, cuando presumiblemente se publicará la nueva novela de Pepe Carvalho, ¿qué tal si repasamos algunas resurrecciones de personajes famosos de la literatura?

 

Muy polémica fue la vuelta a la vida de un personaje más reciente, pero igualmente popular en el Noir de los últimos años: Lisbeth Salander. Desde la publicación de “Los hombres que no amaban a las mujeres”, las novelas de la saga Millenium vendieron millones de ejemplares en todo el mundo. Su autor, Stieg Larsson, era una bomba (médica) de relojería que bebía café como si fuera agua y fumaba compulsivamente. Hasta que el 9 de noviembre de 2004, su corazón dijo basta, dejando inconcluso un proyecto literario de largo alcance.

Entonces comenzaron los problemas con la herencia entre su compañera sentimental, por una parte, y su padre y su hermano, por otra. Fueron ellos los que se llevaron el gato al agua. Y los que encontraron, esta vez sí, un manuscrito con un puñado de páginas escritas por Larsson, en las que continuaban las andanzas de su personaje por antonomasia, Lisbeth Salander.

 

El encargado de dar continuidad a sus aventuras fue David Lagercrantz, periodista y (supuesto) autor de bestsellers cuya obra más conocida hasta la fecha era… la biografía del futbolista Zlatan Ibrahimovic. “Lo que no te mata te hace más fuerte”, que fue como se tituló la cuarta entrega de la saga Millenium, pasó sin pena ni gloria, cosechando bastantes malas críticas y, en general, provocando una general indiferencia.

 

Otra resurrección muy sonada fue la de, nada más y nada menos, Philip Marlowe, el mítico detective privado creado por Raymond Chandler en los años 40 y 50 del pasado siglo. ¿Cómo volver sobre uno de los padres fundadores del Noir, cuyas historias han sido llevadas al cine en diversas ocasiones? ¿Cómo abordar a Philip Marlowe, desde el siglo XXI, tras haber sido interpretado en pantalla por actores de la talla de Humphrey Bogart, Robert Mitchum o Elliott Gould?

Fue nada más y nada menos que el irlandés John Banville el autor que aceptó el reto. Y lo hizo desde la libertad creativa más total y absoluta aunque, como señalara en el momento de la publicación de “La rubia de los ojos negros”, en la novela negra siempre debe haber un crimen, y eso restringe bastante al autor. Pero lo importante, al final, era inventar y reinventar Los Ángeles, tal y como hizo Chandler. Y como volvió a hacer un autor consagrado que publica sus novelas policíacas bajo el pseudónimo de Benjamin Black.

 

¿Por qué volver a Marlowe? Banville lo tiene claro: era un caballero en un mundo violento, un héroe que creía en un determinado tipo de justicia y que, en unos tiempos en los que la novela negra es cada vez más violenta y sangrienta, necesita ser redescubierto por los lectores más jóvenes.

 

Podríamos hablar de las resurreciones de 007, que contó con padres putativos como Kingsley Amis, Christopher Wood o, más recientemente, William Boyd. O de Hércules Poirot, que lo hizo de la mano de Sophie Hannah en “Los crímenes del monograma”, publicada en 2014.

Pero queremos terminar recordando que, tras filmar “El Padrino 3”, Mario Puzo, autor de los guiones de la trilogía y de la novela original, alentaba a los productores a filmar una cuarta parte, cuya acción transcurriría entre los años 20 y 40 del pasado siglo, con Sonny Corleone como protagonista. Y aquí lo dejamos… de momento.

 

Jesús Lens

HA NACIDO OTRA ESTRELLA

Si ayer elevábamos el listón de este Blog, haciéndonos eco de esta exclusiva cinematográfica mundial, hoy os invito a que descubráis quién es esta chica.

Al principio, dudé. Ya no. ¡Nunca mais!

Y, puestos a invitar, os invito a seguir el día a día, la cuenta atrás del lanzamiento de la nueva novela de Murakami.

Hay nervios. Y expectación

Siento haber bajado el nivel, pero… ¡esto es lo que hay!

 

Jesús Bajón Lens. 

 

PD.- Pues sí. Es ella. Lisbeth Salander, interpretada por Rooney Mara, quién ya actuaba en «La red social», la anterior y soberbia película de Fincher. Por cierto, Trent Reznor y Atticus Ross. Yo no sé vosotros, pero yo ya me estoy relamiendo… (Más información, AQUÍ)

¡Oh! ¡Es ella!
¡Im-presionante!