La columna de hoy viernes de IDEAL tiene que estar dedicada, inexcusablemente, a él, cuyo arranque ha sido un éxito brutal, alabado por (casi) todo el mundo, como podemos leer en ESTE REPORTAJE. Y con llamativas colas, como vemos en ESTA ilustrativa oto. Y recuerden que AQUI hay vídeos sobre el Centro y el Cubo.
«Alucinante. Increíble. Espectacular. Una pasada.» Estos y otros calificativos por el estilo son los que venimos oyendo desde que, hace unos días, el nuevo Centro Cultural CajaGRANADA y Museo de la Memoria de Andalucía abriera sus puertas y mostrara los tesoros que se escondían tras ese farallón que, junto al Cubo, viene sorprendiendo y llamando la atención de todo el mundo desde hace meses.
Y no es de extrañar. Por mucho que te lo cuenten y te lo describan, por decenas de fotos, vídeos o imágenes que veas, hasta que no traspasas la fastuosa Puerta de las Culturas y te adentras en las instalaciones del complejo cultural recién inaugurado, no puedes siquiera hacerte una idea de lo que te espera en su interior.
Al oír que un Museo es interactivo en vez de estar basado en piezas históricas o arqueológicas, puedes tener la tentación de pensar que es pobre en contenidos y te va a decepcionar. Craso error. Porque la multimedia y las tecnologías de la comunicación con que está dotado el Museo de Andalucía lo convierten en el espacio más vanguardista y revolucionario que jamás he visto. Impresionante. Personajes históricos que hablan desde varias pantallas que emiten en alta definición, contando sus avatares y aventuras. Mapas parlantes que se iluminan y describen Andalucía hasta en sus más recónditos lugares. Filmaciones, animaciones y música que contextualizan la historia de esta tierra milenaria, siendo capaces de excitar todos y cada uno de los cinco sentidos, incluyendo el olfativo. Uno de esos museos en que lo prohibido es no tocar.
¿Recuerdan ustedes «Minority report», aquella película de ciencia ficción de Steven Spielberg en que su protagonista se ponía frente a unos inmensos paneles y manejaba las imágenes gesticulando en el aire con sus manos? Pues, como me decía mi hermano, cuando entras en este museo te conviertes en un Tom Cruise del futuro que estudia el pasado de Andalucía desde las más diversas ópticas y perspectivas. Un museo llamado a revolucionar la didáctica de la historia ya que, cuando un grupo de chavales lo visite junto a su profesor y descubra esta revolucionaria forma de aprender, ya nada será igual.
Un museo que comunica con el Teatro Isidoro Maíquez, un especialísimo espacio escénico, caja negra rigurosamente despojada en la que el rojo sangre de las butacas resalta con pasión sobre la austeridad ambiental. Un espacio que derrocha fuerza, energía y personalidad.
Y, junto a todo ello, un Centro Cultural que nace con vocación de mestizaje y transversalidad, que no sólo servirá como sala expositiva, sino que generará arte, creatividad, ideas, debate, pensamiento. Una exigente programación de mesas redondas, conferencias, jornadas de debate y reflexión que harán que este singular, vanguardista y moderno rincón de la ciudad trascienda fronteras y se convierta en un icono de la Granada del siglo XXI, polo e imán para la creatividad y el talento.
Jesús Lens Espinosa de los Monteros