Y ahí le tienen, felizmente angustiado, poseído por la reconfortante sensación de que está perdiendo, miserablemente, todo el fin de semana…

Gracias Cuate, por esta instantánea. Que no es del fin de semana. Pero que podría serlo.
Con todo cariño, os deseo, de corazón, que perdáis el tiempo y que este domingo no sirva absolutamente para nada.
A veces, hace falta.
Jesús El Vago Lens.
Comentarios
2 respuestas a «Un deseo»
Cuántas veces se gana el tiempo en esos momentos de dejarse llevar! Se gana vida!
Yo también os deseo unas horas de relajo mental, libertad neuronal y apuesta por lo aparentemente superfluo (y si es rico, mejor que mejor, que no hay nada que unos abdminales de «castigo» no se merezcan el disfrute). Bicos a «puñaos».
(lindísimas las fotos de Pepe siempre que salen por estos foros… no sé si en vez de ojos tiene lentes ópticas, objetivos o qué sé yo. Házselo ver. Chapeau, maestro)
Jejeje que buena pose de vago……..¡para Oscar! Y es que llevais toda la razón: hay que vaguear porque es lo contrario de la actividad, como hay luz y oscuridad, o silencio y ruido. Y si es con una birra, mejor. Y si es con allegados, mejor. Y si es escuchando música, mejor. Lo que es la Vagancia en todos sus frentes. Y gracias Silviña por tus siempre agradables palabras. Que sepas que la próxima vez que nos veamos, te voy a retratar varias veces para recordarte mejor