Además de esta primera Biografía Fingida, y de esta Cita en que les espero a todos ustedes, hablamos de la columna de hoy viernes de IDEAL, relacionado con aquel famoso artículo: «Innovación. Una actitud para el cambio». A ver si les sugiere comentarios y generamos polémica y discusión, pudiendo participar en la ENCUESTA SOBRE INNOVACIÓN que tienen en la Margen Derecha de este Blog.
Hasta el hartazgo se lo hemos escuchado proclamar al Presidente del Gobierno, a sus ministros, gurúes y corifeos: hay que cambiar de modelo productivo. Que si economía sostenible por aquí; que si desarrollo tecnológico, energías renovables, investigación y desarrollo por allá… en pocas palabras: ¡innovación!
Ha llegado el momento. Contra la crisis, innovación. ¿No han recibido ustedes a través de su correo electrónico esos mails con Einstein alabando las bondades de la crisis ya que son precisamente éstas las que nos hacen agudizar el ingenio, cambiar de parámetros y superar un modelo caduco de sociedad?
Pues en esas estamos. Justo ahora. Dichosos, felices y contentos deberíamos sentirnos por tener la oportunidad de vivir tiempos tan interesantes. ¡El final de una época y comienzo de la siguiente, nada menos! Estamos haciendo historia, en fin.
Lo que pasa es que resulta muy complicado acostarse por la noche ahítos de cigalas, con un cochazo de impresionante cilindrada en el garaje, viviendo en una burbuja inmobiliaria que, sin pegar golpe, cada día nos hace más ricos y despertarse por la mañana siendo éticos, solidarios, emprendedores sostenibles y, además, innovadores.
Toda la vida, nuestras madres pidiendo por un trabajo seguro, a ser posible de funcionario, sin preocupaciones ni sobresaltos, poniéndole velas a San Trienio, para ahora, de repente, pedirnos que nos pongamos a emprender e innovar. De golpe y porrazo. Por decreto. ¿Cómo lo ven?
A priori, parece chocar con la esencia de una sociedad en que la costumbre ancestral es que, con el primer sueldo, los jóvenes se compren un coche y, recién pasados a fijos en la empresa, ya menos jóvenes, se compren una vivienda con hipoteca a treinta años, soñando con jubilarse en el trabajo de toda la vida, insignia laboral bañada en oro incluida. Dicho planteamiento vital no parece casar con el riesgo y la actitud valiente y decidida que se le presuponen al emprendimiento y a la innovación. Por ejemplo, ¿a cuántas personas conocen que estarían dispuestas a ligar voluntariamente sus emolumentos a la productividad de su trabajo?
Pero la pregunta es, más allá de cacarearlo a través de todos los altavoces oficiales y oficiosos, ¿se fomenta realmente la innovación en los colegios, los institutos, la universidad y la empresa? Porque, en general, en el mundo laboral sigue primando más el estar que el producir. Aún en los tiempos de Internet y la telefonía móvil, se sigue valorando, y mucho, el que te vean, el figurar, el famoso presencialismo. Lo importante es estar.
Ronda por Internet otra frase que ha hecho fortuna, como la de Einstein. En este caso, se trata de una máxima del célebre filósofo Simpson, Homer Simpson: «Hijos, lo intentasteis al máximo y fracasasteis. La lección es: no intentarlo nunca.» Parece una broma, pero como todo lo que tiene que ver con Homer, hay en ella un enorme y profundo poso de verdad.
Como ésta otra: «Hijo, si realmente quieres algo en esta vida, tienes que luchar por ello. ¡Ahora silencio! Van a anunciar los números de la lotería.»
Jesús Lens Espinosa de los Monteros
Comentarios
20 respuestas a «UN, DOS, TRES… ¡A INNOVAR!»
productividad?… salvo los antiguos destajos y los actuales niños indios haciendo abalorios… pues no caigo.
innovar para mejor mercadear? el bolonia y cosa asi?
hoy, lo xodio, es producir y no vender.
el mercado estaba tan libre que se ha escapado.
La filosofía homeriana debería adoptarse como categórica en el mundo en el cual vivimos… qué razón tiene!
Besillos
Una de las frases de Einstein: “la verdadera crisis, es la crisis de la incompetencia”
No estoy de acuerdo en parte con tu artículo, porque capacidad de innovación existe, emprendedores los hay, gente dispuesta a investigar muchos, planes de desarrollo realmente sostenible se han diseñado y presentado a la administración… El problema es que quien tiene el poder para decidir, apoyar, financiar, respaldar y apostar por la I+D y por la I+D+i son un conjunto de incompetentes liderados por incompetentes y avalados políticamente por incompetentes. De hecho, no saldremos de la crisis por arte de magia sino, en este país, afrontándola desde abajo ya que la apuesta de los gobiernos anteriores ha estado en el ladrillo y no en programas de desarrollo sostenibles ni en facilitar la investigación pública y privada y en impulsar el empresariado joven.
Por cierto, muy bien elegidas las frases de Homer.
Si yo no digo que no exista esa capacidad de innovar y emprender. Por supuesto que la hay.
Lo que digo es que es ridículo cambiar, en 6 meses, «La Fábrica de ladrillos» por «La Factoría de las Ideas» de forma que ahora, por imperativo legal, todos a emprender e innovar, cuando las políticas precedentes han ido precisamente en contra.
A ver. ¿Cuánto se tarda en constituir una sociedad en nuestro país? ¿Y en poner en marcha cualquier negocio, aunque sea un puesto de pipas? Si es que se quitan las ganas antes de empezar!!!
El problema no es cuánto se tarda en montar una empresa (ahora hay procedimientos de constitución por la vía de urgencia, como los divorcios), ni apoyarse en las nuevas TIC para ampliar mercados y aplicar nuevas fórmulas de distribución, ni que no existan líneas de subvención oficiales (que las hay, muchas y complicadas de obtener), ni que el mercado no sea receptivo ante productos o servicios innovadores o diferenciados, …. el problema es que todo lo que se inicie ahora tiene un período de crecimietno y de maduración cuyos frutos los veremos, al menos, dentro de cinco años. Y las actuales empresas, han crecido tan a la sombra del mercado fácil que, la mayoría, han generado estructuras de «empresa vaca» lideradas por equipos directivos incompetentes e incapaces de reaccionar con rapidez generando un nuevo valor a sus productos y a sus procesos internos por la vía de la innovación.
Y lo mejor … dónde va a parar los fondos para subvencionar a los emprendedores y los proyectos de innovación??
Total, que para no estar de acuerdo conmigo, me das bastante la razón ¿no? Que una cosa son los discursos y otra las realidades.
ademas… como innovamos un puesto de pipas? que nuestra industria propia no va mas allá… quitando royaltis, que queda?
hay que resucitar el ladrillo, como sea… no hay otra solución. que no hacemos pisos? pues hacemos pìrámides…
pagando sueldos no como quiere el PP con esclavos…
No estoy de acuerdo …. En parte, sólo en parte. El hombre (en genérico) tiende a ser adulto, responsable, creativo, innovador y emprendedor si se le dan las herramientas y los apoyos para que lo sea. Pero si en vez de eso, se propicia desde la oficialidad y la administración el trabajo fácil, el dinero cómodo y a vivir de la renta mensual, pues esto es jauja. Los autónomos no saben de horarios, ni de festivos ni de ponerse malos y, por ello, si les das a elegir en comparación con los funcionarios y trabajadores adocenados, pues claro que eligen tener un coche con 18 años, un piso con 23 y endeudarse hasta los ojos trabajando a medio gas. Y que innoven y emprendan los hijos de los directivos y altos cargos públicos, que ellos si que tienen fácil lo de las subvenciones estatales y comunitarias.
Por eso, ahora hay que innovar, porque los ladrillos y el cemento ya no dan para más, ni para menos. Bueno sí, para las obras de fomento que siempre son un desahogo para las estadísticas de empleo y re-empleo (por aquello de reconstruir lo que se cae, se rompe o se tuerce a los pocos meses de inaugurarlo).
Alto concepto tienes tú del hombre, amigo Jomanalle. ¿Qué fue antes, el Hommo Innovationis por naturaleza o las herramientas que le ayudan a convertirse en Hoomo Innovationis?
Por cierto, participen en la encuesta de la Margen Derecha, a ver cómo de innovadores nos consideramos a nosotros mismos.
Foces, el ladrillo ha muerto. Y no volverá. Al menos, no como en estos años anteriores. Reconvertirse… o al INEM. 18 meses. ¿Y después? ¿Darwin?
si, que dentro de 50 años puede ser que estemos innovados… lo malo son estos 50 años…
que enseñamos a nuestros hijos? dejando a un lado los funcionarios mal pagados pero incombustibles (y que gran parte no son incombustibles, son contratados… «laborales», vamos que se les puede despedir con cuatro duros… que eso no lo sabe todo el mundo) digo que yendo a lo privado… que empleos hay? que oficios son factibles de ganar un salario?.
¡Cuánta razón que tienes! Conozco a gente que valdría muchísimo en su puesto de trabajo y como destacan por su inteligencia y creatividad son relegados a puestos sin importancia o no les mandan trabajo en absoluto para que no destaquen. Difícil de llevar a cabo una reforma seria cuando los de arriba en muchas empresas impiden los cambios y reformas.
Queido Jesus, habia mandado un post con mi bio-grafia de Teodulo pero no lo han publicado.
Hay que tener cuidado de no meterse con las declaraciones de Cañizares ni «tocar» a Teodulo.
Libertad de expresion !!!
[…] empezar el fin de semana con una sonrisa! Lo que no nos exime del deber de ser innovadores, emprendedores y sostenibles. Y de votar en la encuesta de la Margen Derecha. […]
Jomanelle y tú, Jesús, estáis diciendo lo mismo y razonadamente. Es muy gracioso que se quiera innovar a golpe de decretos y se venga a Andalucía, con el 25% de paro, y se diga alegremente que vamos a ser la repera en innovación+ desarrollo+tecnología+ investigación… Un PC portátil para cada alumno –diez minutos más tarde parece que ya ha sido matizado-, pero no se pregunta: 1º si hay programas suficientes como para “de pronto” pivotar toda la enseñanza desde quinto en el ordenador y 2º, y más importante, ¿están los sufridos maestros y profesores preparados, además, para asumir esa tarea? A ellos quién los imnova, quién los desarrolla, quién los actualiza, quén los estimula, quién los respeta…
Precioso cuento el de La Lechera.
Pero en la función pública también puede existir la innovación. No la función pública tal y como está concebida, pero sí una función pública más moderna, en la cual también puede intoruducirse el I+D+I. Pero es necesario que la clase política crea de una vez por todas en la clase funcionarial que está injustamente vista en este país, muy amigo de los tópicos.
Esa es la clave, Alter, que quienes la proclaman, se la crean. En la Función pública, en las Cajas, en la empresa privada y en un taller de coches. La I+D+i debe estar presente, además, en nuestra vida privada, en nuestras aficiones y en nuestras relaciones con los amigos.
Pero eso supone afrontar desafíos, cambios… algo a lo que no nos enseñan. Somos el país del Virgencita, virgencita ¿no crees?
José Antonio, creo que has dado con el quid de la cuestión: que los políticos se lo crean. Y yo añado, mientras se lo creen, por favor que se callen, que no digan más estulticias que lo único que generan son desconfianzas y aumento del absentismo, como consecuencia del alejamiento entre lo que ellos piensan y lo que la sociedad cree. Que dejen de defender su pesebre, y piensen en la sociedad, de cuyos impuestos comen.
Jesús, no me huele nada bien que el Estado se meta en mi vida privada; las muletillas de I+D+i, o “poner en valor” en la vida familiar no debe entrar en nuestras vidas y cuando se gobierna, no se predica: se hacen y creo en la libertad y creo que somos adultos. El gobierno nos tiene que decir la verdad y las soluciones a tomar. Eso de estar en medio del tsunami y decir: -¡vamos a reunirnos a ver que propuestas me hace la oposición! no es honesto. Para eso no lo hemos votado: un gobierno tiene que gobernar y si lo hace mal, a los cuatro años, puerta. No me interesa lo que piensa o hace o puede hacer el partido de la oposición, me interesa qué solución propone mi Presidente del Gobierno de España.
No vayamos ahora a pensar que el utilizar el avioncito para ir a acciones de partido es un acto de civismo para promover el I+D+i.
Por ejemplo, la vergonzante campaña electoral para unas elecciones ¿europeas? a la que estamos asistiendo, en la que los políticos siguen empecinados en una política barriobajera, descalificativa y nauseabunda.
Pídannos a los demás un cambio de paradigma, mientras siguen ustedes con esos vídeos y esos mensajes que da pena verlos y escucharlos…
Carrasqueño, malos tiempos para la Res pública
[…] frase, cargada de sentido y de largo alcance, que nos devuelve a esta polémica columna que, sobre la Innovación, publicamos el pasado […]
[…] Pero no me gusta que me tomen el pelo. Y, a lo largo de la campaña, no he oído una sola palabra sobre la construcción europea. Ni tampoco sobre su futuro, sobre las posibles ampliaciones, la Tarjeta Azul y las políticas de inmigración, la defensa común europea y los avances en una diplomacia comunitaria que permita a Europa tener una sola voz en la ONU. Y, por encima de todo, me hubiera encantado saber qué políticas continentales se barajan para cambiar de modelo productivo y avanzar hacia esa economía innovadora y sostenible que preconizan nuestros dirigentes. […]