El alcalde de Otura ha dicho esta tarde que hará lo que le pida la militancia de su partido. Pero Ignacio Fernández-Sanz sabe que se encuentra -son palabras suyas- en un callejón sin salida. Sobre todo después de que seis de sus siete compañeros del gobierno municipal entregasen el jueves al juez un libro de instrucciones para que lo investiguen. Un material donde figura documentación que quizás alguien daba por desaparecida.
O se van los seis -que no va a suceder- o el alcalde y su concejal de Urbanismo tendrán que asumir en cuestión de horas que apostaron a rojo pero les pinta muy negro.
Hasta que la justicia no aclare si hay o no algo ilegal, tenemos que hacer lo posible para no condenar al alcalde por anticipado. Pero que tu propio concejal de Economía ponga en entredicho cómo has gestionado el dinero es motivo suficiente como para depurar responsabilidades políticas. La denuncia que ha entrado en el juzgado de guardia alerta de los presuntos delitos de falsedad en documento oficial, prevaricación y malversación de caudales públicos.
Ignacio Fernández se irá -podemos apostar sin riesgo a equivocarnos-, pero no lo hará en silencio.
Aquí dejamos el comentario el jueves. Pero el alcalde aún no ha formalizado su dimisión.
Hablé con él al filo de la media noche y me aseguró que se marcharía porque está agotado. Pero la palabra del todavía alcalde de Otura solo hay que tomarla al pie de la letra hasta el preciso instante en el que sale de su boca.
Ignacio Fernández aún conserva una amplia legión de seguidores dispuesta a defenderle por encima de todas las cosas. Y le están presionando para que continúe, sin importarle -o quizás por todo lo contrario- que lo que todavía es un enfrentamiento puntual adquiera otra dimensión y haya víctimas de mayor peso político.
Desde la cuenta aparentemente oficial del PP de Otura han dejado este mensaje en twitter. «Ignacio Fernández-Sanz sigue siendo el presidente del Partido Popular de Otura y el alcalde del municipio. Le pese a quien le pese».
A estas alturas, quien tiene más interés en que el alcalde se vaya es la cúpula del partido.
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