Tiene La Moncloa un usuario de Twitter muy renovado y activo, a camino -algunas veces- entre la transparencia informativa y el papel cuché. Ayer colocaron un tuit premeditado con cuatro fotitos de las manos del presidente Pedro Sánchez dibujando distintos gestos serenos y decididos tras abordar con su homóloga alemana Angela Merkel asuntos de emigración.
Acompañaba las imágenes un texto que aclaraba la metáfora para los que andamos perdidos en las nuevas técnicas de comunicación y la nueva política: “Las manos del presidente marcan la determinación del Gobierno”.
Olvida el autor del mensaje que un político debe ofrecer la mano pero, sobre todo, tiene que dar la cara.
.@sanchezcastejon evalúa sus recientes encuentros con líderes europeos tras visitar esta mañana a #AngelaMerkel en Berlín. Las manos del Presidente marcan la determinación del Gobierno. Mañana comparece ante el @Congreso_Es pic.twitter.com/QZqtwQa3rT
— La Moncloa (@desdelamoncloa) 26 de junio de 2018
Tan preocupados andan en Moncloa por construir el personaje que corren el riesgo de olvidarse de las personas.
Porque mientras Pedro Sánchez andaba haciendo manitas en Twitter, a Motril -por ejemplo- llegaban ayer 132 inmigrantes, entre ellos nueve niños. El lunes fueron otros 96 y los últimos -incluidos los menores- han tenido que pasar la noche custodiados en un pabellón cubierto que más que al paraíso soñado parece una tostadora.
No llegaron en el Aquarius, por lo que no había ni foto ni medalla que colgarse ante Europa.
Y digo todo esto porque casi un mes después de alcanzar La Moncloa, Pedro Sánchez aún no tiene su subdelegado del Gobierno en Granada. Mientras tanto, la cifra de inmigrantes que han llegado al puerto de Motril se ha duplicado en lo que va de año y en las últimas semanas se han colapsado todos los recursos.
¿Quién gestiona esta crisis humanitaria? ¿Un subdelegado en funciones que no puede tomar decisiones que exigen una directriz política?
El delegado en Andalucía, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis -al que tampoco se ha visto en las últimas horas por Motril-, se ha precipitado este miércoles por la tarde y ha anticipado que el viernes nombrará a sus subdelegados en las ocho provincias. Para entonces, más de 230 inmigrantes habrán superado las 72 horas en los centros de acogida temporal y estarán deambulando por las calles.
La Moncloa tiene que descender a estos asuntos. Antes de que la gente empiece a pensar que se trata de un Gobierno de posturitas y postureo.