La sempiterna jovialidad del estudiante se hizo notoria la mañana del uno de diciembre de 1934 cuando los jóvenes alumnos de la Universidad de Granada pidieron vacaciones con una fiesta que se celebró por las calles de la ciudad. Así lo contaba IDEAL en la crónica de la fiesta, publicada el 2 de diciembre de 1934:
«Las calles de Granada fueron, en la mañana de ayer, recorridas por una pintoresca comitiva, cuyos componentes habían requisado todos los coches de caballos existentes aún en las paradas de alquiler y llevaban a su paso gran algarabía; eran los estudiantes, que pedían vacaciones.
A las diez y media, la plaza de la Universidad se encontraba llena de coches y entre los estudiantes se advertía la preparación de «algo gordo».
La juerga comenzó con el ‘bautizo’ de un compañero, al que pusieron el nombre de ‘Vacaciones Humo del Puro’, después de verter sobre su cabeza el contenido de una botella de sidra en el estanque del Jardín Botánico. Aquellos días los excesos universitarios no estaban mal vistos y la ciudad aceptó como una divertida broma el desfase de los chicos. Los estudiantes pusieron una peseta por cabeza para alquilar los trece coches de caballos que había disponibles, y desde la plaza de Derecho, enfilaron en cabalgata por el centro de la ciudad. Delante, ‘el neófito’ en brazos de su ‘madrina’ disfrazados para la ocasión, bebiendo directamente de la botella y al grito de «¡vivan las vacaciones!».
Pero no eran tiempos para bromas. En octubre los obreros de Asturias se había sublevado y el temor a que la revolución se extendiera por todo el territorio tenía a las autoridades nerviosas. En Granada, el gobernador civil, Francisco Duelo, no tardó en reprobar este tipo de fiestas: «nada podrá disculpar su conducta si insisten, con el sabido propósito de adelantar las vacaciones de Pascua, en producir algaradas».
Duelo había destituido meses antes al alcalde Ricardo Corro Mocho, e incremento la vigilancia en las ‘rondas volantes’ para capturar ‘vagos y maleantes’:
«Quiero por tanto, adviertan ustedes que cuando se encuentro a un maleante en lagún establecimiento de bebidas o mala nota, su propietario o dueña será también detenido y cerrado el local si no se ha denunciado la presencia de este sujeto» , dijo a IDEAL el 5 de diciembre de 1934
También se hablaba mucho aquellos días de la recogida de pobres de las calles de la ciudad, medidas que se tomaron para evitar cualquier sublevación.
2 comentarios en El primer ‘botellón’
Deja una respuesta
Buenas Amanda,
El desfile ocurrió el sábado 1 dic 34 y por eso se publicó el domingo 2. En el ejemplar de 5 dic; Duelo comenta el desfile que hicieron los estudiantes el sábado.
Saludos y te añado a favoritos.
Muchas gracias, corrijo la fecha!