En esta semana que concluye han coincidido dos eventos relevantes para este periódico, como son la celebración de lo que llamamos Foros IDEAL. El primero tuvo lugar el miércoles en Almería, con la presencia del consejero de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, Luis Planas, y el viernes, en Granada, otro con el responsable autonómico de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo. El primero estuvo dedicado a la agricultura y el segundo al desarrollo sostenible y energías renovables. Sin presunción, ambos resultaron un éxito, pero no voy a recrearme en ello, prefiero aportarles alguna reflexión sobre una cierta singularidad, valor u oportunidad que tenemos en esta tierra andaluza.
Aunque pueda parecer simple, la ubicación geográfica de provincias como Jaén, Granada o Almería favorece el desarrollo de ciertas actividades económicas y no otras. Desde los cultivos de olivares centenarios hasta la agricultura intensiva almeriense, desarrollada desde hace pocas décadas, se deben también a una climatología específica muy favorable. Donde hay luz hay vida, el sol es la gran fuente de energía de este planeta. Ahora, ciertas posiciones europeas ponen en riesgo a este sector, por lo que es fundamental conseguir el máximo apoyo.Una climatología agradable propicia el turismo y más si se ofrece al mismo tiempo un excepcional patrimonio cultural y artístico, como es la Alhambra, o una singular naturaleza como Sierra Nevada, Cazorla o Cabo de Gata.
Está claro que no tenemos petróleo, pero sí podemos utilizar unos recursos naturales que permiten la generación de energía por fuentes renovables, gracias al elevado número de horas de sol y la fuerza del viento en determinadas zonas. Se trata de un elemento diferenciador que ha situado a empresas españolas como referentes y líderes mundiales, a nuestra comunidad en modelo de aprovechamiento de energías limpias, ya que más del 33 por 100 de la electricidad consumida por los andaluces proviene de fuentes renovables, cuando en 2006 suponía menos del 7 por 100. Sin duda se trata de una actividad estratégica y una apuesta política que merece la pena defender, como los grandes cultivos de nuestras provincias y la preservación de sus riquezas históricas, que tanto favorecen al turismo.
Bendito sol y bendita tierra, fuentes de riqueza que no podemos desperdiciar, cuando tenemos tanta escasez de ellas, de innovación, emprendimiento o creación de empleo. ¿No les parece?
P.D. Permítanme que en esta época de escasas buenas noticias, como decía Mariano Rajoy hace unos días, celebremos los 80 años de existencia de IDEAL, esta cabecera tan arraigada en Granada, Jaén y Almería. Gracias a nuestros amigos, lectores y anunciantes.