Las pensiones y su futuro vuelven a estar de actualidad a raíz de las recientes movilizaciones de miles de jubilados en treinta ciudades de España, para exigir una mejora en la actualización de las misma y reclamar la sostenibilidad del sistema en el futuro. Nadie creo que se oponga a que los pensionistas tengan sueldos dignos, como tampoco creo que se opongan a que su viabilidad esté garantizada para futuras generaciones. Pero una cosa es querer y otra muy diferente es poder. La realidad pinta bastos como ya comenté hace una año en ‘Pensiones, cuestión de sueldos’, donde ya alertaba que las reducidas cotizaciones de los precarios sueldos estaban suponiendo un grave problema para compensar las nuevas altas de los pensionistas. En resumidas cuentas, con salarios de 800 euros no se pueden mantener pensiones de 1.200 euros. Comentaba también que a este problema había que añadir uno mayor y estructural, nuestra deficiente pirámide de población, que es de todo, menos pirámide. Ello implica que el actual modelo de pensiones basado en la solidaridad intergeneracional está en jaque. A día de hoy, cada pensionista es sostenido por dos trabajadores. En el futuro esa ecuación es imposible y se reducirá a un trabajador por cada pensionista. (más…)