Me ha dado la sensación de que a ciertos sectores del PSOE y de la Junta no les ha agradado demasiado que se abra el debate sobre la ampliación de la estación de esquí de Sierra Nevada.
Llego a esta retorcida conclusión después de comprobar que ni el delegado de Medio Ambiente ni el de Turismo han querido decir esta boca es mía.
Los analistas políticos y yo somos así de astutos a la hora de leer entrelíneas.
En efecto, hay personas que solo quieren debatir si se asumen por anticipado sus conclusiones. Y eso no es.
Sorprende que ahora se vuelvan tan garantistas los mismos estamentos que han asistido complacientes a cuantas barrabasadas urbanísticas se han cometido en Pradollano o sus alrededores.
Pero no esta la cuestión en la que quiero entrar, que a mí la nieve me gusta en cubitos de hielo y con güisqui.
Sobre lo que voy a reflexionar es sobre la habilidad del PSOE y de la Junta granadina para escaparse de los debates de doble filo.
Y como no quiero ser ventajista lo haré hoy, sin esperar al 21 de noviembre.
Hay delegados de la Junta que ni se conocen, porque se han preocupado más por seguir las directrices de Sevilla que el sentido común. Por eso han perdido más tiempo en justificar los despropósitos que en intentar resolverlos.
Y así tenemos un espacio escénico prometido en la campaña de 2004 –antes de la crisis- que ni siquiera ha empezado a construirse. Un Centro Lorca que tenía que estar terminado hace más de un año. Carreteras sin empezar y otras acabadas y sin inaugurar porque no se pagan. Un metro paralizado que va a tardar, por lo pronto, un año más de lo previsto y tocamos las castañuelas. Un tren a Motril para el que encargaron un estudio que ni siquiera se atreven a enseñar porque dudo que exista. Una Ronda Este que se perdió en la Unesco.
Pero los delegados de la Junta -que haberlos haylos aunque se dejen ver menos que las meigas-, cuando no callan, justifican esta situación calamitosa.
Lo jodido para el PSOE es que se ha quedado fuera de los proyectos que el propio partido ha propuesto y que el PP, sin hacer nada, se ha encontrado con el discurso hecho.
El PSOE puso las idea pero no puso la cara.
El 15 de noviembre, a cinco días de las elecciones, se va a organizar en la Costa un cónclave por las infraestructuras al que previsiblemente acudirá Javier Arenas. De nada servirá recordar que Aznar ni siquiera contempló el tren del Mediterráneo. O que fue el PSOE quien empezó las infraestructuras, aunque estén sin acabar.
Los socialistas granadinos habrán perdido el debate porque sólo se preocuparon de justificar a otros socialistas.
Soy socialista y me parece un buen análisis. Nos ha faltado crítica y autocrítica
Será bonito vez a Torres Hurtado y Arenas inagurando un metro con Paco Cuenca y Pezzi en cuarta o quinta fila diciendo «nos está bien merecido por no darle el uso que se me ocurre a tantas bolsas de doritos
Déjate de pamplinas, Chirino y danos tu opinión acerca del hecho de que los contribuyentes de la ciudad paguemos los escoltas del Presidente de la Diputación, que nada aporta a la ciudad. Además, ¿escoltas para qué?. Vivo en la Chana y no vemos un policía local por allí nunca, a pesar del caos de tráfico.