En enero de 1938, el gobierno de Franco creó el Servicio Nacional de Regiones Devastadas con el objetivo de dirigir los proyectos de reconstrucción de los territorios del bando nacional destruidos durante la Guerra Civil.
En septiembre de 1944, hace 70 años, las autoridades provinciales visitaron la Alpujarra, comarca donde se concentraban más municipios acogidos a este plan de rehabilitación, para comprobar la marcha de los trabajos. La comitiva, encabezada por el gobernador civil José María Fontana, comenzó el recorrido en Lanjarón donde Regiones Devastadas estaba construyendo la casa cuartel de la Guardia Civil y el grupo escolar. Siguió el viaje por Órgiva y Tablones, en donde apenas quedaban unos detalles para ser entregado, continuaron en Pitres, Pampaneira, Capileira, Bubión, Pórtugos y Trevélez.
En nuestra provincia fueron varios los municipios que, por haber quedado prácticamente destruidos durante el conflicto, se consideraban «adoptados por el Caudillo». Guadix, Moclín, Deifontes, Jayena o Limones se unían a los alpujarreños Tózar, Mecina Fondales, Pitres, Órgiva o Tablones, una cortijada de 18 vecinos en la que Regiones Devastadas invirtió más de 1.900.000 pesetas y que convirtió en un pueblo. con nuevas viviendas, una iglesia y un ayuntamiento.
El 23 de mayo de 1944 el organismo entregó al ayuntamiento de Guadix las obras de rehabilitación realizadas en este municipio, entre las que estaban la plaza, que quedó totalmente destruida durante la Guerra, el cuartel y nuevas escuelas.