Vitamina C para el movimiento vecinal. Oxígeno de ilusión y aspirina de reconocimiento. El anuncio del gobierno municipal, realizado a través de la Concejalía de Participación Ciudadana que preside Vicente Aguilera, ha tenido el efecto de un electroshock en el siempre convulso mundillo de las asociaciones de vecinos granadinas.

La primera conclusión de la medida de equiparar a todas las asociaciones de vecinos de la ciudad con los mismos derechos de participación ha catalizado la ilusión y se ha convertido en una inyección de optimismo para el movimiento vecinal.

El edil Vicente Aguilera explica para contextualizar la situación que «en los años ochenta se decidió que no se admitieran más asociaciones de vecinos porque con las que había ya eran suficientes».

Pero ha pasado mucho tiempo y la ciudad ha crecido y ha cambiado. Por estas razones «he dado orden a los técnicos del Área de Participación Ciudadana para que realicen las modificaciones técnicas necesarias para que en 2015, siete asociaciones vecinales, que trabajan, asisten a las juntas municipales de distrito  y tienen su sede oficial donde se reúnen, puedan encontrarse en igualdad de derechos que las otras 32».

Lógicamente, matiza, «este proceso va a pasar primero por el pleno vecinal, luego irá a las comisiones y se tramitará en la junta de gobierno local para finalmente llegar al pleno para su aprobación final».

La concejala socialista Ana Muñoz Arquelladas valora que «nos encontramos con un cambio de parecer del concejal de Participación Ciudadana, y ahora parece que sí es factible ampliar el número de asociaciones de vecinos en la ciudad, cuando hace menos de un año era algo imposible. ¿Será porque iniciamos la carrera electoral?», se pregunta.

«Satisfacción». Es la palabra con la que Paco Puentedura, del grupo municipal de IU, define la noticia «y que el gobierno municipal haya cambiado de opinión y deje de tratar a las asociaciones de vecinos como si fuesen de primera y de segunda».

«Siempre hemos defendido el reconocimiento en pie de igualdad de todas las asociaciones de vecinos y que por tanto se incluyese dentro del registro pertinente las que llevan años funcionando y preocupándose de sus barrios y con numerosos socios».

En Bajo Albaicín entienden que «nuestra incorporación a ese registro municipal tendrá que ver con la nueva ley que está tramitando la Junta de Andalucía, en la que sí estamos participando. No tenemos ninguna comunicación por parte del Ayuntamiento y, como todos los años, tampoco nos han contestado al escrito de solicitud para un local municipal».

Respecto a esta inmediata nueva situación, responden que «cada asociación cuenta con autonomía.

La nuestra seguirá interviniendo en la misma línea y contando con las personas, socios o no, con las que compartamos modelo de barrio y defensa de los intereses generales de sus habitantes». Respecto a la colaboración en el distrito entienden que «no nos afecta, ni en los retos ni en el funcionamiento, ni en las áreas de trabajo, el cambio de situación». En resumidas cuentas, «la nota positiva será que tendremos derecho directo a ocupar una vocalía en la junta de distrito sin tener que someternos, como hasta ahora, a una votación entre los vocales en la que nos exponíamos a no ser admitidos».

REACCIÓN DEL BARRANCO DEL ABOGADOEn el Barranco del Abogado también han recibido la noticia «con mucha alegría. Llevamos luchando trece años para dar este paso tan importante para la asociación. Es esencial  para que estemos reconocidos en el Ayuntamiento. Falta todavía mucho trabajo que hacer, por ejemplo las limitaciones geográficas de las asociación».

También afirman que «la asociación siempre ha trabajado codo con codo con el distrito y seguiremos haciendo así nuestro trabajo. No cambia nada en nuestra manera de trabajar para mejorar  un barrio y una ciudad tan bella como Granada». Señalan que «los retos más importantes son los que se trabajan diariamente en la asociación y en los proyectos que estamos preparando para el año que viene».

«Con la crisis que estamos pasando con las pocas subvenciones que se reciben hay que pensar mucho para hacer proyectos de calidad para que los vecinos estén contentos». Termina la presidenta su valoración con un pensamiento que desea compartir: «La sabiduría consiste es saber cuál es el siguiente paso: la virtud en llevarlo a cabo», termina de valorar.

LA REACCIÓN DE ALBAYDAAlbayda entiende que «tras 25 años sin incluir asociaciones vecinales en el registro municipal correspondiente, nos parece de justicia que se reconozca el trabajo vecinal de los catorce años realizados por nosotros».

Añade que «trabajaremos en colaboración con cualquier organización ciudadana de Granada que defiendan intereses colectivos» y creen que un objetivo común es «concienciar de la función instrumental que cumplen las asociaciones vecinales en la gestión municipal de la participación».

«Nosotros no tenemos ni equipamientos deportivos en el barrio», dicen en la asociación Parque Lagos. Reconocen que «es una aspiración de siempre tener la misma categoría». Razonan que «la ciudad ha crecido y hay nuevos problemas que necesitan enfoques distintos».  «Y somos nosotros los vecinos del barrio los que mejor podemos explicarlos y ofrecer las propuestas».

También opinan que «debería haber más distritos, porque hay muchas idiosincrasias diferentes. En el Zaidín, por ejemplo, la población es mayor y en nuestro barrio cada dos por tres nacen niños de matrimonios jóvenes. Todo esto indica que hay distintas necesidades».

LA REACCIÓN DE ZAIDÍN CAMPUS«¡Fuiiiiiiiii!», chifla el presidente de la asociación Zaidín Campus. «Consolida nuestros doce años de trabajo y de lucha. Aunque estamos legalizados como colectivo, esto es un paso adelante en la consolidación de derechos, algo muy necesario para seguir trabajando».

«Ahora tendremos la tranquilidad no solo por ser un colectivo más, sino como asociación de pleno derecho».

El fallecimiento de Mari Carmen Castro, presidenta de la asociación de vecinos Granada Oeste, fue terriblemente sentido en el movimiento vecinal. Como bien recuerda el presidente de La Chana, Fernández Ocaña, «con su ida, la asociación quedó huérfana y está prácticamente desaparecida.Hace ya unos meses estuvieron ordenando todos los papeles del despacho de la asociación, me dijeron, y supongo que estarán preparando algo para reactivarla. Ya lo veremos». El concejal de Participación Ciudadana confirma este aspecto: «Esperemos que los vecinos se movilicen ahora y reactiven esta asociación de vecinos del distrito Chana».

Todo pundonor, Manuel Urbano Martínez toma asiento en la junta de distrito de Zaidín cada mes como vocal de esta institución. Da la cara, toma notas y escucha. Participa. Es el aliento de la asociación Ciudad Jardín-Vergeles, que fundara en su día José Serra Cebolla, recientemente distinguido con uno de los premios al ‘Vecino Ejemplar’.

Manuel reconoce ahora que «desde la dimisión del anterior presidente estoy solo». Por eso recibe la noticia de la ampliación de asociaciones de vecinos «con toda la alegría, porque esto supondrá la reactivación del movimiento vecinal para solucionar todos los problemas con los que nos encontramos».