El estiércol huele que se las pela. Eso creo que lo sabemos todos.
Pero también se sabe que es el abono con el que, en el caso que nos ocupa, lucen mejor las plantas, flores, árboles y jardines de la ciudad de Granada.

La Concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Granada ha empezado este otoño la campaña para estercolar los parques y jardines de toda la ciudad. El proio concejal, Juan Antonio Mérida, ha visitado las obras que en estos momentos se desarrollan, por turno, en el Carmen de los Mártires, en el parque Carlos Cano del Zaidín y en el de la urbanización de los Cármenes de San MIguel.

El problema, denuncian los vecinos afectados, es que como ni llueve ni hace frío, el abono depositado ha provocado un hedor insoportable. Por eso, piden al Ayuntamiento que ordene que se realicen los trabajos necesarios para mitigar este efecto nauseabundo, que consiste en remover el abono con la tierra de los parques y añadirle arena y, después, regar.

En la imagen de Ramón L. Pérez se ve al presidente de la mancomunidad de propietarios de la urbanización Cármenes de San MIguel sentado en uno de los bancos del parque, junto a una pequeña montaña de estiércol, protegido por una mascarilla.

Según denuncia, ha solicitado una solución por dos veces a la empresa concesionaria y se ha reunido ya con una de las personas del departamento técnico de la Concejalía de Medio Ambiente, «pero de momento, no hay solución y hoy mismo (por ayer) han vuelto a venir otros dos camiones con abono».