«Si vives en el Centro, te jodes».
La frase la he oído cientos de veces. Te la dicen con una mezcla de rabieta, envidia y algo más que no atino del todo a descubrir. Se refiere a que si vives en el centro de una ciudad, como es el Realejo en el caso de Granada, tienes unas enormes ventajas pero también tienes que aguantarte. Vale. Lo acepto. Toda decisión en esta vida tiene sus pros y sus contras.
Si vives en una urbanización en un chalet, un poner, en Cúllar Vega, dispondrás de un buen jardín, una barbacoa si así te apetece y su piscinilla para pasar los rigores del verano. Un salón enorme, un garaje para convertirlo en tu retiro y hacer tus chapuzas, tus fiestas y tus aficiones y hasta puedes tener un perro y no tener que sacarlo siquiera a pasear. Eso sí, para ir a Granada te tienes que comer una media de cuarenta minutos al día entre que vas y vuelves.
Si vives en el Realejo como es mi caso, puedes ir a cualquiera de sus mítica tabernas, bares y restaurantes en un paseíto por un empedrado con todo el sabor que apenas dura un par de minutos. Y luego vuelves silbando. No tienes que quedar con los colegas ni con las amigas porque aparecen por los bares sin necesidad de cita alguna. El Realejo es barrio de día y es barrio de noche, tiene un comercio pujante y para las compras diarias no tienes que ir a ningún supermercado, nos bastamos con nuestras fruterías, pescadería, carnicerería, ferretería y todos los demás, como ya lo he contado alguna vez.
Esta reflexión no quita para que la vida en el barrio sea manifiestamente mejorable Y como lo es, un nutrido grupo de vecinos así lo ha hecho y ha decidido manifestarse este pasado sábado por las calles del barrio para terminar leyendo un comunicado en el Campo del Príncipe. La asociación se llama Todos somos Granada y surge como respuesta a la asociación de vecinos del Realejo, a la que tildan de «inoperante», y que apenas tiene veinte miembros, según las últimas elecciones.
¿Qué piden?
La Asociación Todos Somos Granada pretende «manifestar nuestra disconformidad ante la falta de respuesta por parte del Ayuntamiento ante las distintas reclamaciones que desde plataformas, colectivos y asociaciones venimos haciendo por la situación del barrio». «El principal problema que preocupa a los vecinos es el alto nivel de contaminación al que a diario está sometido el Realejo, producido por el gran volumen de tráfico rodado, encontrándonos así ante una «movilidad caótica e insostenible». «Granada tiene su casco histórico abandonado, es insoportable el problema de movilidad; los atascos y el aire contaminado convierten este barrio en un peligro constante para peatones, ciclistas y vecinos».
La manifestación transcurrió sin incidentes y supone, según la organización, un pequeño primer paso para las reivindicaciones. Algo se mueve en el Realejo, y no tiene pintas de que se vaya a parar.
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