Queridos organizadores, promotores y responsables de prensa de espectáculos varios como el pasado concierto de Ricky Martin en la plaza de toros de Granada: el enemigo no somos los fotógrafos que vamos a cubrir el show para nuestros medios de comunicación.
No entiendo por qué ponéis tantas pegas a la hora de realizar nuestro trabajo: que si solo se pueden hacer fotos de los temas 2 y 3 (para que solo lo saquemos con tal o cual vestimenta o solo grabar el audio de esos temas), que si hay que hacer las fotos desde la zona de la mesa de sonido (para el que no lo sepa está a unos 50 metros del escenario) si durante todo el concierto, repito TODO EL CONCIERTO, hay miles de personas haciendo fotos, grabando vídeos o incluso haciendo directos en Facebook Live, Youtube o cualquier otra red social.
Para que veáis como las condiciones en las que trabajamos rozan el ridículo, os voy a contar lo que nos pasó en el concierto de Ricky Martin el 24 de mayo de 2017. Llegamos los ocho fotógrafos que cubrimos el concierto una hora y media antes para recoger la acreditación. 15 minutos antes de empezar nos acompañan al interior y nos dicen que la zona para hacer las fotos es debajo de la mesa de sonido y detrás de la gente… La cara que se nos quedó fue como la del emoticono asombrado. Le decimos por activa y por pasiva que desde ahí, cuando la gente levante los brazos con los teléfonos móviles, no veremos nada de nada. La respuesta de los responsable fue: «esto es lo que hay». Después de ruegos y muchos «por favor», nos dejaron estar en alto con los de la mesa de sonido.
¿No os dais cuanta que la imagen de vuestro representado va a distribuirse con una calidad de imagen y sonido nefastas a través de esos miles de móviles que llenan los conciertos? ¿No veis que no sirve de nada que nos impidáis sacar a Ricky Martin con otro vestuario porque lo van a sacar con una pésima calidad en miles de páginas de Facebook? ¿De verdad que no os merece la pena dar la mejor imagen de vuestro representado?
Pienso que os equivocáis, que siempre será infinitamente mejor la imagen que podemos sacar nosotros, los fotógrafos profesionales, que son las que se van a distribuir por toda la prensa.
Pero en fin, la última palabra la tenéis vosotros. Nosotros como profesionales siempre vamos a sacar la mejor foto que podamos, pero que si por mi fuese…
Qué razón llevas Ramón, se están distribuyendo, con esos móviles fantásticos de la juventud, de todo y nada profesional como lo que vosotros hacéis.
Sigue en tu planteamiento. Suerte y siempre serás un profesional.
Gracias Paco por el ánimo, siempre alerta. En unos días subiré un post con lo que me ha pasado hoy en el concierto de Raphael, ha sido todo lo contrario.
Querido compañero, eso nos ha pasado y os seguira pasando mientras que los organizadores no tengan dos dedos de luces. Eso pasa por no tener las empresas organizadoras buenos responsables de prensa. Sigue en la misma línea y que la suerte te acompañe. Un abrazo
Razón tienes compañero
Hola, Ramón.
Junto con mi madre y mi cuñada asistí a este concierto. No sé si habrá llegado a vuestros oídos, pero la tuya no es la única pega a la organización, al menos por mi parte.
Nosotras llegamos sobre las 8, y estaban todos nuestros asientos (gradas generales) pillados. Nos tuvimos que poner más a la izquierda de la cuenta. No veía parte del escenario, ni cuando se subía a la plataforma a cantar lo veíamos, así que creo que esa zona era la de «visibilidad reducida» (entrada más barata) pero como no había separación ni control de entradas, la gente que debía sentarse ahí, se sentaron en las nuestras…
Cuando fui a comprar las entradas me dijeron que las zonas estarían delimitadas, y estuvo claro que no fue así… No es normal que se vendan 2 tipos de entrada para las gradas (unas más baratas que otras por ser de visibilidad reducida) y nadie controle esas entradas ni quién se sienta dónde…
Un saludo.
Pues ya veo que no somos los únicos que tenemos problemas, gracias Silvia por compartir.