Ha sido uno de los momentos profesionales más emotivos que he vivido. ¿Por algún agasajo o reconocimiento? ¿Fue quizás la culminación de algún proyecto especialmente difícil? ¿Se produjo quizás en la ciudad más bella que uno nunca pudo soñar? Pues no ha sido por nada de eso…
Pincha en la imagen para acceder al articulo completo