Llevo unos días pensando que me gustaría mucho volver a detener la mirada en algunos de los proyectos más interesantes que pude realizar a lo largo de tantos años como arquitecto… muchos de los cuales me hicieron sentir dichoso porque me permitieron documentarme, estudiar, reflexionar, aprender de otros, … ¡Crecer! Y de otra porque objetivamente fueron buenos trabajos: buen proyecto, buena ejecución, racionalidad en los costos y en los plazos, y satisfacción general sobre los resultados.
Así que de vez en cuando… quizás semanalmente, os los vaya mostrando… ¿Os parece bien? Adelante entonces, y empezaré por la RESTAURACIÓN DEL TEMPLO DE NUESTRA SEÑORA DE LA ANUNCIACIÓN. CORTES DE BAZA (Andalucía, España):
Se trató de la restauración de un templo mudéjar del siglo XVI ubicado en una pequeña localidad del norte de la provincia de Granada perteneciente al Obispado de Guadix. Por aquel entonces existía una labor conjunta entre esta entidad y la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía a fin de programar de mutuo acuerdo la prioridad en las intervenciones del Gobierno Regional para la restauración del patrimonio cultural propiedad de la iglesia católica. Por tanto, el proyecto se realizó a instancias de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía y tuvo una fase de trabajo preliminar que denominamos “Estudios Previos”, en la que se sentaron las bases para identificar las labores de documentación e investigación que se consideraron necesarias.
LOCALIZACIÓN Cortes de Baza (Granada)
FECHA INICIO / FIN 1998/2005 (ejecutado)
PROMOTOR Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía
TIPO DE PROYECTO Restauración de patrimonio cultural
Nº EXPEDIENTE 29.98.CB
El Proyecto finalmente propuso a grandes rasgos las siguientes líneas de actuación:
-Consolidación y restauración de elementos estructurales que presentaban problemas de estabilidad y acabados.
-Liberación de las estructuras originales del templo mediante la limpieza y demolición de los cuerpos que, con el tiempo se habían ido adosado a los muros del templo original y la sacristía, y que distorsionan la percepción del volumen y el espacio.
-Restauración completa del artesonado y de sus policromías.
-Sustitución completa de cubiertas, ya que las humedades por filtraciones suponían un problema serio para el artesonado de gran valor.
-Restauración de los paramentos de las fachadas, y
-Reposición de los pavimentos.
Y al volver la mirada a este proyecto, tantos años después de que concluyó su ejecución, quiero recordar especialmente a dos personas ya fallecidas ya que ambas eran muy entrañables para mí, pero sobretodo porque fueron esenciales para la viabilidad de esta actuación: la arquitecta Virginia Bueno, coordinadora de los trabajos desde la administración y el sacerdote Jose Luis de los Reyes Arenas, Delegado de Patrimonio del Obispado de Guadix. También fue esencial la intervención de técnicos como José Cuaresma, Merche de los Reyes, Elena Palomares, Lucía Valero, Paco Castillo o Dionisio Olgoso, así como a la empresa Alberto Domínguez.
¡A todos ellos gracias de corazón!
Quiero mandar desde aquí un grannnn abrazo a mi querida amiga Esther Rodríguez Fernández que tanto nos ayudó al equipo de GR en nuestros proyectos de restauración y rehabilitación de numerosas viviendas y edificios históricos
Estimado señor:
Por un lado le manifiesto mi satisfacción por la labor de restauración y consolidación, que se necesitaban con enorme urgencia, de nuestro maravilloso templo, cuya documentación al efecto yo mismo presenté en la delegación de cultura. Por otro lado, mi queja por algunas cosas que se hicieron mal, muy mal:
-La ampliación del presbiterio, cuyas dimensiones ahora son una barbaridad y una inutilidad, dejando el espacio para los fieles, en esta iglesia ya de por sí pequeña, reducido a dimensiones penosas, que ahora el pueblo padece y lamenta. No procedía imitar el espacio primitivo cuando la feligresía lo necesita.
-El suelo de cuarto de baño, o de cocina de cortijo, que se puso. Si se quería emular la solería de los templos mudéjares de nuestra diócesis, se tendría que haber recurrido a unas losetas de cerámica pura, bien cocida, como las primitivas.
-La eliminación de las pinturas barroco-renacentistas del arco toral. Atentado incomprensible.
-La eliminación de las iniciales de los Reyes Católicos, inscritas en ricos medallones en el paramento frontal, flanqueando el remate del retablo. Otro atentado sin explicación.
-La restauración de la policromía de las tablas del artesonado no se ha llevado a cabo. Reconozco desconocer el porqué…probablemente porque el presupuesto no dio más de sí, sí lo hubo para cosas innecesarias, y aunque se consolidaron las cubiertas y se eliminaron humedades, faltó culminar el proyecto…restaurar y consolidar las policromías…pero el rico y noble artesonado, en su cubierta sobre la nave, se mantiene negro y desvencijado.
-Para rematar, el ignorante párroco de turno, compró y colocó un espantoso viacrucis neogótico de grandes dimensiones en todos los flancos de la iglesia, malogrando la pureza del blanco en los muros mudéjares.
-En sus agradecimientos, ha omitido el nombre del principal promotor de este proyecto: Andrés Porcel Fernández, gran gestor y persona de extraordinaria valía y bondad.
-Para contrarestar esta crítica, le agradezco la mención a su tío D.José Luis de los Reyes, hombre que aupó y promocionó a usted mismo en su buen hacer de arquitecto, como hizo con tantas otras personas; hombre de grandes capacidades que desarrolló, él solo, con no pocos sacrificios, proyectos de gran calado que hoy perviven; hombre a quien respeté y quise muchísimo.
Atentamente