El mapa de los borrones

corrupcionmap

Los que pasamos por el colegio antes de que Jose Ignacio Wert viniera a rescatarnos de nuestra mala educación, vivimos aún sumidos en la ignorancia de no haberle encontrado ni utilidad ni sentido a la raíz cuadrada. A fuerza de colocarnos en el mapa mudo las Islas Canarias a la derecha porque no cabían en su sitio, nos perdimos en los planos y, en mi caso, en los bares.

Y eso le ha pasado a los colegas del PP andaluz, que cuando querían trazar la cartografía de la corrupción socialista se confundieron de pueblos y se pintaron la cara.

Ahora he comprendido al fin tanto empeño que ponían en la egebé por que coloreásemos a circulitos para no salirnos del contorno. Que uno piensa que está rellenando Armilla y resulta que le ha colocado la etiqueta de corrupto al alcalde de Granada.

El ‘mapa de la corrupción’ que presentó José Luis Sanz parece que lo ha hecho el mismo que diseñó al ornitorrinco. ¿Le pongo pico? Ponle. ¿Pezuñas? Échale. ¿Pinto Granada capital? Píntala. ¿Coloreo El Ejido? Con témpera, que está más chulo. Le voy a tirar también con Adra; es nuestra pero queda bien de lunaritos.

Y así, el principal aspirante a liderar el PP andaluz en las próximas elecciones presentó el lunes un mapa de 171 alcaldes socialistas corruptos donde aparecen ayuntamientos gobernados por los populares -hasta 13 en el caso de Granada-; exdirigentes que finalmente resultaron absueltos; y expedientes administrativos equiparados a procedimientos penales.

Si un periodista publica un mapa de esta guisa, al instante tendría tantas llamadas y cartas de rectificación como alcaldes aludidos. Y el propio José Luis Sanz o algunos de sus voceros que tanto defienden la verdad cuando piensan que está de su parte, te habría soltado ya una retahíla de frases hechas sobre la profesión, el sensacionalismo, Belén Esteban y el Sálvame Deluxe, para acabar inquiriéndote con esa pregunta provocadora: Y tú, ¿dónde estudiaste periodismo? Que viene a ser como cuando a un árbitro le dicen que se ponga las gafas.

Pues al PP parece que todavía no se le han saltado los colores con el mapa de los borrones. Aunque alguno ha quedado tan quemado que probablemente haya que hacer cuenta nueva; porque ya no se sepa qué pinta o porque no pinte nada.

6 Comentarios

  1. Creo que la única justificación de la ley Wert es las muestras de ignorancia de los dirigentes del PP. Ver a la alcaldesa de Madrid, en Buenos Aires hablando spanglish con ese desparpajo, haría sonrojar a cualquiera, a ella no. Su esposo Anzar, es catedrático en una universidad USA y los dos se entienden en el lenguaje de Shakespeare. El ministro Soria dice que el meridiano de Greenwich pasa por Canarias, que el lo sabe por ser isleño y no hay nadie que lo corrija. Faltaría más, que no es que le suba la luz, es que se la corta. Para que seguir, Mato, la ministra de la Salud, tiene un Jaguar en su cochera y se creía que era un 600.Menos mal que Wert nos va a abrir los ojos.

  2. Para mí, lo peor de esta crisis, que nos tiene sumidos en la inquietud, el miedo y la rabia, no es la crisis en sí, sino la desesperanza que me embarga cuando reflexiono sobre la incapacidad y falta de preparación de los que nos gobiernan ( no hacen falta nombres, basta con mirar los periódicos). Sólo con pensar que mi economía o mis derechos, mi futuro o el de mis hijos, que es lo que más quiero,está en manos de estos inútiles (en Madrid, en Sevilla o en Granada), me pongo a temblar y las pesadillas me alteran gravemente el sueño. Y me pregunto: ¿ Como es posible que la sociedad haya puesto en manos de esta gente tan poco seria, tan ineficaz y tan irresponsable las instituciones democráticas?. ¿ Dónde está la gente preparada y honesta? ¿ Por qué no da un paso al frente?. En fin…

  3. En el partido Popular de Granada no hay corruptos, ya se encargo Don Sebastián de ponerlos en su sitio. Un ex alcalde de la lista , ha trasladado sus “conocimientos políticos” a Melilla para seguir probando fortuna, piensa cambiar las palmeras del puerto melillense por acacias de oro ,que son más rentables.

Responder a Quico Chirino Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *