“La Sociedad Comprometida”
La entrada en un nuevo año siempre invita a las promesas, o cuanto menos, a la reflexión. Trascendiendo este momento puntual, pienso que también es una ocasión propicia para hacer una reflexión en alto sobre la realidad actual para nuestra tierra andaluza de la que como Ciudadanos Comprometidos no podemos permanecer ajenos… En Andalucía en particular estamos sintiendo con especial virulencia estos efectos perversos de una crisis atroz que debiera exigir una mayor implicación de cada uno de nosotros y de todos en conjunto. En este sentido, queremos compartir con vosotros la reflexión que al efecto ha realizado un amigo de este blog: el Dr. JOSÉ EXPÓSITO HERNÁNDEZ, con quien que no podríamos estar más de acuerdo:
2014: UN BUEN MOMENTO PARA MIRARNOS AL ESPEJO
Sin dejar de reconocer en ningún momento todo cuánto hemos progresado en Andalucía en las últimas décadas (educación, infraestructuras, sanidad) lo cierto es que las estadísticas nos sitúan en una situación muy desfavorable en relación a nuestro entorno, tanto dentro de España y fuera de ella. Las cuatro “P” son devastadoras: las peores cifras de Paro, de Pobreza y exclusión social, nuestros resultados en el informe PISA y, finalmente, en el PIB per cápita, en el que la comparación con otras regiones como País Vasco o Navarra, pero también con Castilla León o Galicia nos produce verdadero pesar. Estas referencias externas coinciden en general con nuestras percepciones y nos hacen ser pesimistas respecto a nuestro futuro y el futuro de nuestros hijos. Más que otros, desde luego.
Después de 40 años de democracia y de ayudas millonarias de la UE (fondos FEDER), de haber vendido nuestro suelo y de haber permitido la degradación de nuestras costas, tenemos la certeza de que somos de los españoles que peor estamos soportando la crisis (con más miseria y más paro) y que más vamos a tardar en salir de ella. Y que incluso los desequilibrios dentro de nuestra propia Comunidad son también más importantes (brecha entre ricos y pobres). Esta situación ha ocasionado un enfado social en ocasiones muy arrebatado, aunque pasajero, así como protestas frente a los grandes causantes de esta última crisis (o la ausencia de ellos). Pero no ha suscitado sin embargo ningún debate social serio que nos ayudara a entender qué nos ha estado pasando, qué hemos hecho peor que otros o cuáles son las causas profundas de nuestra peor posición.
Muchos ciudadanos pensamos que esta reflexión tenemos que hacerla, que no podemos seguir adelante sin que nos plantemos ante nuestra realidad, la analicemos y la intentemos comprender. Creemos que es de todo punto imprescindible que las mejores cabezas de dentro y fuera de Andalucía, nos ayuden a plantearnos el futuro de otra manera. Personas del mundo del arte, de la ciencia, de la sociología, de la historia.., así como ciudadanos de a pié con ganas de tomar partido, tienen que ayudarnos a entender lo que pasa a nuestro alrededor para que seamos capaces de plantear qué sociedad queremos, y qué sociedad no queremos. Que nos permitan entrar sin demagogia en asuntos de calado de nuestra vida diaria: Qué hay de cierto en la cultura de la subvención, qué hay de nuestra ineficiencia productiva, y un largo etcétera.
Necesitamos organizar un gran lugar de encuentro, un macro congreso que no se llamaría ‘Todos contra Andalucía’ si no más bien ‘Los andaluces ante su realidad’. Claro que caben consideraciones de los agravios que como sociedad hemos sufrido, pero lo nuclear debería ser nuestra participación como sociedad en este estado de cosas. Un lugar de encuentro que nos permitan sacar conclusiones pero también plantear nuevos interrogantes e incertidumbre. Una sociedad que no tiene incertidumbre no es dueña de su historia.
Con ser imprescindibles, la instancia política está incapacitada para liderar este movimiento. Han dado diarias muestras de su incapacidad para debatir, de su falsa lucha contra la corrupción salvo que sea de la ajena, y de su inclinación casi exclusiva a mantenerse en el poder o de alcanzarlo. Pero ello no quiere decir que no debamos utilizar las instituciones públicas, de utilizar sus espacios y sus recursos para ponerlo al servicio de esta causa. Sin que esté libre de estas dificultades, es posible que la Universidad pudiera ser el foro adecuado para armar esta propuesta, con capacidad para darle el recorrido en el tiempo que sea necesario y que pueda concitar las suficientes empatías para que nadie se sintiera excluido. Una Universiada, tal vez con otros objetivos.
Quizá esta propuesta pueda parecer muy infantil o muy ingenua. Si alguien tiene algo más interesante es el momento de que lo plantee. Con urgencia. Si pensamos que esta reflexión nos resulta imprescindible, no podemos espera que se resuelva espontáneamente. El 2014 que comienza puede ser un buen momento para mirarnos al espejo.
Fdo. José Expósito Hernández.
Basta ya de mirar para otro lado, o más concretamente, hacia el de enfrente con la cultura del “y tu mas” o de la “patada para adelante”. Debemos coger el toro por los cuernos de una vez como ciudadanos y ponernos a conversar y debatir constructivamente.
Los protagonistas, la sociedad; el ámbito, Andalucía; el momento, ¿por qué no ahora?
Al igual que acabamos el año comenzamos el 2014 con ese telón de fondo, que todos conocemos bien: la dichosa crisis.
Quizás como comenta José es necesario unirnos, formar varias mesas redondas dónde la protagonista sea una lluvia de ideas y se llegue a unas conclusiones nuevas de como producir, consumir y vivir en esta sociedad actual para conseguir un escenario muy distinto al que hemos dejado en el 2013.
Estoy totalmente de acuerdo contigo, pero despues de la que ha caido (y sigue cayendo) y ahora que las macrocifras y la dichosa prima de riesgo empiezan a dar indicios de que la caida ya ha finalizado, dificilmente esto que propones se pueda llegar a realizar. Aunque por estas razones, creo que es el momento idedoneo para buscar alternativas al modelo económico que nos ha llevado hasta aquí y de reflexionar sobre las instituciones públicas que no han sabido ni detectar los problemas y mucho menos solucionarlos. Por lo tanto mi apoyo total a tu propuesta.
Estoy de acuerdo en que debemos pararnos a pensar qué somos y qué necesitamos para conseguir las metas que deseamos, pero sin compararnos con nadie. Es cierto que en el periodo democrático Andalucía a crecido en todos los sentidos, pero también es cierto que partíamos de unas bases que poco tenían que ver con las de otras comunidades.
Reflexionar y ser conscientes de en que sectores somos fuertes. Fomentar el I+D para aumentar el VAB de la agricultura, regularizar las bases legales, para que el desarrollo de un sector tan importante como el turismo no se traduzca en una degradación de nuestro patrimonio natural, o seguir trabajando en la consolidación del tejido industrial.
También hay que decir que nos han robado y mucho, y que mucho dinero del que ha llegado a nuestra comunidad se ha quedado por el camino, y que, porque no aceptarlo, nos hemos callado y mirado para otro lado.
Por último estoy de acuerdo en un foro ciudadano, pero fuera de la Universidad, puesto que ya no es el espacio imparcial que era. Es una institución totalmente politizada que baila al son de los partidos, algo que salió sin pudor a la luz en las primeras elecciones a rector.
Estoy de acuerdo con el artículo en que la única forma de salir de la situación actual es analizándola y siendo autocríticos, para después dar soluciones que no gustarán a todos. Pero ¿quién le pone el cascabel al gato?.
Me temo que soy pesimista, hay mucho intereses creados y todo está muy politizado, pero no en el buen sentido de la política. Y probablemente cualquier debate sólo quedaría en buenas palabras y una hoja de ruta tan ambigua que no se podría llevar a cabo.
Hay muchos ciudadanos anómimos y pequeñas asociaciones que están tirando del carro, gracias a todos ellos.
Es imposible estar lejos de este blog, aunque cada día me lo propongo. Y soy muy sincero al expresarme a mi mismo. Estar lejos es, porque no consigo nada en crear un dialogo a mis ideas con aquel que esta o no de acuerdo con el mensaje, porque no hay coloquio y sí una exposición individual. Pero tocando a mi Granada y a esta tierra de mi alma, que es Andalucía, no puedo sangrarme mas, que el verla degradada en sus gentes y tan falta de COMPROMISO SOCIAL de sus jerarcas, desde el presidente de la Junta, los rectores económicos,…hasta el mas despojado de integración básica, social y economica.
Es cierto que hay que proponer un lugar de encuentro que ataje el por que de esta pobreza de riqueza promotora. Habría de iniciarse un estudio de esta realidad tan compleja, separando las partes y buscando su relación entre ellas mediante una síntesis en busca de las soluciones aparentemente ocultas y construir las vías de salida que aunque perdidas, den luz a un pensamiento critico y solución de planificación en busca del por que en esta falta de riqueza social andaluza. Para ello, en este estudio se tendría que plantear por entendidos sociales y políticos, un reconocimiento de los elementos que provocan esta pobreza de organización, que es el origen de todo el problema andaluz, creando unos criterios que conduzcan a una síntesis del origen a esta dejadez de la iniciativa andaluza. Un foro de discusión creado dentro del marco universitario con entendidos, que den conclusión novedosa de los elementos constitutivos de la identidad social de sus gentes. Hay que ser ANDALUZ COMPROMETIDO. Pero esto no deja de ser ideas, faltas de un respaldo en iniciativas, como es el gene andaluz. ¿Hasta cuando? GRACIAS
En realidad se trataba en el pequeño artículo de mostrar una profunda necesidad: pensar por qué estamos donde estamos si otros han avanzado más y si, como vemos a diario, la degradación de nuestra sociedad andaluza es manifiesta. Probabalmente la Universidad, como señala Natalia no es el sitio, aunque es quizá donde más cantida de ideas, propuestas y puntos de vista pueden reunirse. Además por que se necesita infraestructura para poder hacerlo. No es una experiencia 15M 2, aunque bien mereció la pena.
Las macrocifras positivas es señal de que los mercados voraces han saciado sus bodegas con el dinero que iba a destinarse a sanidad, educación etc y que nos van a dejar hipotecados por décadas, así que no es óbice para forzar estas reflexiones si no todo lo contrario.
Como señala Paco Picó, pueden se solo ideas. Irremediablemnte es necesario empezar por ideas: desde cuándo no las tenemos, desde cuándo lo que oimos no son más que los titulaes y las consignas mal elaboradas de los grupos de interés, hechas solo para consumo interno. Sinceramnete desde cuándo no veis ideas frescas y audaces en nustro entorno.
Habrá que seguir pensando cómo hacerlo viable.
Amigo Jose. Todo parte de una profunda crisis económica en toda Europa. Todo ello unido por la putrefacción de la acción política de nuestro entorno nacional de cualquier signo doctrinal, con una nula participación ciudadana en la justicia social. Hay que plantear al poder político y económico, una reflexión de su inoperancia en el bien social para sus votantes. Hay que movilizar a las masas populares, que manifiesten en la moderación y exigencia, su descontento de la situación política, generalizado por la ineficacia política e institucional. Hay que crear foros de discusión a nivel de barrio, ciudad y región, capaz de catalizar las necesidades de la población y poner fin al declive en la escasez de valores morales y el aumento de pobreza económica y social de gentes, que siempre tienen en sus ideas algo bueno para debatir sobre los cambios necesarios que recuperen la confianza en sus políticos, revalorizando la cohesión social e incentivando al capital en hacer uso de sus reservas, en la creación de industria productiva que de beneficios y trabajo para enriquecer la situación actual de gran separación de clases sociales, con la desaparición de la sufrida clase media. Esto es lo que pienso. Y para ello hay mucha gente preparada para incentivar la puesta en marcha de las IDEAS. Y finalmente hay que acabar con esta diversidad asimétrica de la identidad de los godos españoles, siempre en disputa, buscando una identidad de aldea trasnochada en los siglos, perdidos en la irrealidad histórica.
GRACIAS