Un barrio modesto, trabajador, de obreros jóvenes nació hace medio siglo en Granada. Casería de Montijo. Con el tiempo esos jóvenes llegados de todos los pueblos de la provincia de Granada se han hecho mayores. Igual que los propios edificios.
La Junta de Andalucía emprendió en los años sin crisis un programa de rehabililtación para ete tipo de viviendas de protección oficial. Se trata de asegurar lso tejados, «que están que se caen», aumentar su seguridad y eliminar las goteras. Pintar las fachadas, poner ascensores par esta gente ya mayor, arreglar y poner nuevos cuadros de electricidad y contadores de agua. Es decir, las tripas de los bloques de edificios.
De los cuarenta bloques la Junta ha dejado sin reformar 11 y a otros cinco más los ha dejado también colgados porque aunque las reformas están terminadas las empresas concesionarias no han cobrado y, por ejemplo, los ascensores instalados no funcionan hasta que se les pague.
Ahora, los vecinos afectados, denuncia el presidente de la Asociación de Vecinos de Casería de Montijo, han presentado un recurso en bloque para que la delegación de Vivienda de la Junta de Andalucía termine el programa de reformas en los bloques de edificios consignados, donde viven más de un centenar de familias.
Como no hay respuesta oficial de la administración, el presidente vecinal recoge el sentimiento de todos los afectados: «Hemos sido engañados y estafados».
CRÉDITOS
-La fotografía es la calle Mayor de Casería de Montijo, de Alfredo Aguilar