Las obras prioritarias solicitadas por el distrito del Zaidín para que se realicen en la medida posible por la Concejalía de Urbanismo a lo largo del año 2015 fue protagonista en la junta de distrito celebrada este miércoles
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Las obras solicitadas abarcan todo tipo de actuaciones. Destaca como actuación prioritaria la solicitud de un recinto ferial fijo, un espacio definitivo para las Fiestas y el Festival de Rock del Zaidín «que sea multiservicios durante todo el año», explicó Antonio Ruiz, presidente vecinal.
Se pide también el soterramiento de los contenedores de basura del barrio, una zona de deportes para el Parque Cruz de Lagos, la supresión de las barreras arquitectónicas en todo el barrio, adecentar las esquinas del estadio Nuevo Los Cármenes.
En el segundo bloque se pide terminar el acerado y el alcantarillado de la calle Casillas Bajas, y el cerrramiento del Parque Tico Medina. También se pide un avance en el carril bici y abrir la conexión de la avenida de Dílar con el Parque Tecnológico de la Salud.
Por último, pero no con carácter prioritario y dirigido a todas las administraciones implicadas, quieren que se lleven a cabo «las reivindicaciones históricas».
A saber, la comisaría de la Policía Nacional, que se terminen las plazas del barrio que quedan por urbanizar, un nuevo centro de salud, la unidad diurna de estancia, el desarrollo completo de las viviendas en Santa Adela y la terminación de las obras del metropolitano.
La junta de distrito del Zaidín tuvo mucho movimiento asimismo con el tema de posible aparcamiento en la plaza de la Concordia.
La portavoz socialista Ana Muñoz Arquelladas quiso saber «en nombre de los vecinos afectados» si el gobierno local «ha tenido contactos oficiales con los promotores de este aparcamiento» y pidió al presidente de la junta, Antonio Granados «que les dé las explicaciones oportunas que le solicitan».
Antonio Granados sí explicó que la plaza de la Concordia «pertenece al distrito Genil y por tanto no tengo competencias, así que trasladaré las solicitudes». Antonio Ruiz, presidente vecinal del Zaidín, dejó claro «que por una línea arriba o abajo del límite del Zaidín no voy a dejar de atender a todos estos vecinos que vienen aquí a pedir información».
Añadió Granados pese a la bronca generalizada del público que «no hay nada respecto al aparcamiento en el Ayuntamiento de Granada. No hay ningún papel y no hay nada». Terminó Granados que «entiendo que nos acercamos a un proceso electoral y ustedes buscan grieta», en referencia al PSOE.
Uno de los vecinos de la plaza de la Concordia interrumpió a gritos al presidente Granados, y éste no tuvo más remedio que apercibirle por su comportamiento. Añadió toda una batería de acciones que está dispuesto a realizar, «desde reunirnos cuando termine esta junta, hasta mediar para que mi compañera María Francés, responsable del distrito Genil, les atienda».
«Eso sí, no voy a permitir ninguna pregunta más sobre una cuestión que no es de este distrito». Y se lió la marimorena con gritos y acusaciones. Una vez calmados los ánimos, cuando terminó la junta de distrito, Antonio Granados se reunió con estos vecinos.
LA VERSIÓN SOCIALISTA
Los representantes socialistas presentes en la junta, Ana Muñoz Arquelladas y Paco Cuenca, criticaron la pérdida de papeles de Antonio Granados «al no saber canalizar la acción de los vecinos».
Asimismo Paco Cuenca, aseguró que «no nos queda más remedio que pensar que el equipo de gobierno del PP en el Ayuntamiento de Granada tiene intención de permitir la construcción del un aparcamiento privado en la plaza de la Concordia contra el que se han movilizado centenares de vecinos».
La foto es sintomática.
Una tarde de verano y, aunque solo se vea en parte, una sala de reuniones del Centro Cívico Norte a rebosar de gente para la celebración de la junta municipal de distrito de la Zona Norte, donde se intercambian los ‘alcaldes de barrio’.
Por un lado el concejal Jorge Saavedra deja Norte y pasa a Chana y de igual forma pero al revés Telesfora Ruiz deja Chana y llega a Norte. El concejal de Participación Ciudadana Vicente Aguilera apadrina el intercambio y la ceremonia, hay que decirlo, es emotiva y entrañable.
Son tres concejales en raya frente a los vocales de la junta de distrito que incluye a los presidentes de las asociaciones vecinales y a la concejala socialista Jemi Sánchez, activa y comprometida y parte activa del consenso que ha logrado con el presidente saliente que esta junta sea operativa.
La razón es que los barrios sufren mucho con la crisis, los recortes, la falta de medios y la consecución de consensos es aplaudida a la hora del adiós.
También es verdad que los retos son enormes y que muchas familias granadinas esperan mucho de las juntas de distrito.
LA CEREMONIA DE TRASPASO DE PODERES
La ceremonia de traspaso de poderes de ayer comenzó puntual a las seis de la tarde. El concejal de Participación Ciudadana, Vicente Aguilera, ofició como maestro de ceremonias con palabras amables hacia el alcalde saliente y la alcaldesa entrante. Jorge Saavedra aseguró en su intervención que «no es una despedida. Sigo siendo concejal». Justificó sus posibles errores porque «metemos mucho la pata aun intentándolo hacerlo bien. Os pido disculpas. Nunca, sí lo puedo asegurar, nunca con mala intención. Siempre creyendo que era lo mejor».
También destacó que «hemos conseguido que aunque no tenemos mucho poder ejecutivo en estas juntas sí sean la voz de los vecinos».
Telesfora Ruiz defendió en su primera intervención su conocimiento de los barrios de la Zona Norte: «Tenía ‘veintimuypocos’ años. Estudié Psicología y luego Derecho. En la primera carrera tenía una asignatura que se llamaba ‘psicopatología’, y las prácticas eran con niños que presentaban dificultades de aprendizaje. Me tocó la Zona Norte y estuve todo el año con peques de barrios de esta zona. lo que me permitió una aproximación al distrito».
«Esto ocurrió hace mucho tiempo y el distrito ha cambiado enormemente en esta trayectoria, gracias a la presión que siempre ha habido, la reivindicación de los vecinos. Por ejemplo, para hacer el trabajo venía acompañada de una persona del trabajo, voluntaria, con presencia en la Zona Norte, sino no hubiera podido hacerlo por la presión que había como de rechazo a la gente que no es de aquí».
De aquí relató que «en 2001 estuve de directora de la oficina de empleo, entonces Inem, que llevaba la Zona Norte y en 2003, gerente del IMFE, el lugar donde más amistad he hecho con la gente de aquí».
«Ahora, anunció, me toca asumir el papel de portavoz de los problemas de los vecinos del barrio, y lo único que puedo prometer y prometo es interesarme de todos vuestros problemas. Comenzaré una ronda de entrevistas con los presidentes vecinales del distrito e intentaré chinchar a los compañeros con responsabilidad en las áreas correspondientes».
Todos los presentes en pie en el Centro Cívico Norte, Telesfora juró sobre la Biblia su nuevo cargo entre aplausos.
José Fernández Ocaña, presidente de la asociación de vecinos de La Chana, Rufo como le conocen en el barrio, estaba exultante con el ambiente del sábado al mediodía en las fiestas de La Chana.
Sombrero de paja y bermudas acompañadas de camisa amplia para combatir el calor, dirigía el concurso de tortillas de patatas que supone el acto central del mediodía del sábado, ecuador de unas fiestas del barrio de La Chana que empezaron el juves con el pregón ofrecido por el director del Centro de Salud del barrio y cuya primera noche, la del viernes, contó con la presencia del concejal de Participación Ciudadana, Vicente Aguilera.
Tras las concienzudas deliberaciones del jurado para elegir la mejor tortilla del concurso, se presentaron 18 tortillas a cual más especatular, Rufo anunció a los vencedores del concurso con un afrase chispeante: «La Chana está llena de grandes tortilleros y tortilleras», que hizo reír al gran número de personas congregadas.
La fiesta se prolongó como cada año hasta el amanecer. El presidente vecinal, José Fernández Ocaña, asegura que «sacar las fiestas adelante es una misión de la junta directiva porque los vecinos de La Chana las piden cada año». Y, claro, no hay quien les acueste.
El barrio de Parque Nueva Granada de la Zona Norte de la ciudad ha celebrado este fin de semana sus fiestas. La tarde-noche del viernes estuvo de lo más animada. Los niños llenaban la plaza central del barrio y los padres les acompañaban. Los grupos de baile demostraron su arte con un poderío elegante y rítmico.
El concejal de Participación Ciudadana del gobierno municipal del Partido Popular, Vicente Aguilera, no se perdió la jarana. El viernes por la noche fue el encargado de ofrecer el pregón de las fiestas del barrio de Parque Nueva Granada.
Sus palabras fueron cariñosas y alimentaron el sentimiento de barrio, lo que fue profundamente agradecido por el presidente de la asociación de vecinos, José María García.
Vicente Aguilera, que repitió como pregonero por segundo año consecutivo, se lanzó micrófono en mano sobre el escenario y ‘calentó’ al personal y les animó a disfrutar de las fiestas pese a ir cortas de presupuesto por la crisis.
El presidente vecinal anunció que a continuación seguirían las actuaciones musicales y la verbena pero antes quiso rendir homenaje a los concejales y a los miembros de su junta directiva. Dicho y hecho, todos fueron subiendo al escenario y recibieron el aplauso agradecido de los vecinos por su trabajo por el barrio.
Mientras caía ya la noche completa de este verano y el espectáculo se adentraba en sus sones y ritmos, los concejales presentes disfrutaban de las fiestas.
Allí estuvo la edil socialista Jemi Sánchez acompañada por conocidos vecinos de la Zona Norte como Jesús Guerrero Extremera, el presidente de la asociación de vecinos de Casería Montijo, Clemente Arco y una amplísima representación del grupo municipal del Partido Popular: Juan Francisco Gutiérrez, Jorge Saavedra, Juan García Montero, Telesfora Ruiz.
El alcalde en funciones Juan Antonio Mérida también hizo acto de presencia para felicitar al presidente de la asociación de vecinos de Parque Nueva Granada.