Apenas cuenta la fotografía con treinta años de existencia (recuerda que la primera imagen fotográfica permanente se hizo en 1826) y ya nos atrevemos de hacer montajes fotográficos, lo que demuestra que el ser humano no es capaz de plasmar la realidad como es, sino como quiere que sea. Este icónico retrato realizado con la técnica de la litografía sobre 1860, es otro caso de manipulación fotográfica.
Esta célebre fotografía de cuerpo entero del decimosexto presidente de los Estados Unidos de América Abraham Lincoln, es producto del montaje de dos fotografías, el cuerpo corresponde al político sureño John Calhoun y la cabeza del presidente Lincoln.
La fotografía de Lincoln fue «manipulada» por la empresa Eastman Company (ahora conocida como Eastman Kodak).
Resulta irónico que John Calhoun era un firme partidario de la esclavitud, al contrario que Abraham Lincoln.
Ramón L. Pérez / FOTOPERIODISTA