Desde la Ley de descentralización de 1982, el alcalde es el que firma las licencias, el que impulsa los documentos de urbanismo, libera terrenos para construir, imagina el desarrollo de su territorio y deroga muchas veces sus propias decisiones. Continuar leyendo →
Ayer sábado día 3 de julio, en la Sala de Juntas de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Granada, se celebró la Asamblea-Encuentro de Salvemos la Vega. Manolo Cala invitó a ‘La Ciudad Comprometida’ a participar en ella. Continuar leyendo →
La vitivinícola comarca gallega de Ribeiro forma parte de la Depresión de Orense, en la confluencia de los valles generados por los ríos Miño, Avia, Amota y Barbantiño. Aquí el templado y lluvioso clima atlántico modifica parte de sus regímenes térmico y pluviométrico y se hace más mediterráneo, al contar con al menos tres meses al año en los que las precipitaciones se reducen drásticamente y la insolación anual se aproxima a las 2000 horas; factores que, junto a la templanza térmica (14,5ºC de media anual), favorecen el cultivo de la vid, a su vez propiciado por unos suelos profundos (entre 70 y 100 cm), con importante presencia de piedras y gravas que mejoran su textura y facilitan la insolación de los racimos. En este marco físico, Ribeiro integra, junto al viñedo, densos bosques caducifolios en las culminaciones de serrezuelas y entre abruptas formaciones rocosas, sobre todo graníticas, y singularidades tales como los “socalcos”, que son balates de piedra, con más de mil años de antigüedad, que forman terrazas sobre las laderas, con el fin de ganar superficie de terreno agrícola y de contrarrestar la inclinación de vertientes pronunciadas, y que se destinan mayoritariamente a plantas leñosas como la viña. Continuar leyendo →