EL MEJOR ARQUITECTO DEL SIGLO XX

«La Arquitectura Comprometida»

Miguel Fisac.
Miguel Fisac.

Este mes de agosto he tenido la oportunidad de visitar algunas obras del arquitecto español Miguel Fisac, considerado por muchos como el mejor del siglo XX. Ha sido durante un viajecito al Pirineo Aragonés donde iba en busca de montaña y naturaleza, pero de donde traje sobre todo sensaciones… y entre ellas la sorpresa de los edificios de este colega, ya que estuvo casado con una aragonesa de Candanchú (ciudad vinculada a los deportes de la montaña).

Allí encontré la Iglesia de Nuestra Señora del Pilar, consagrada en 1969, y que veinte años después fue declarada Monumento Histórico por el estado español… Os la describo:

“Se integra en clara armonía con el magnífico paisaje pirenaico en el que se inserta. El conjunto arquitectónico se dispone en forma de abanico, cerrado por un muro frontal sinuoso y con una cubierta de gran pendiente casi paralela a la ladera.

Su interior tiene una fuerte carga simbólica y destaca el prodigioso dominio de la luz materializado en los muros desnudos de piedra, sobre los que se abren vanos por los que la luz penetra y tensa mágicamente el espacio.

Constructivamente combina el sistema tradicional de muros de carga de mampostería de piedra, con una estructura de cubierta prefabricada. La cobertura de todo el inmueble se realiza mediante bandejas de aluminio en su color.”

La iglesia parroquial de Nuestra Señora del Pilar en Canfranc.
La iglesia parroquial de Nuestra Señora del Pilar en Canfranc.

Visité este humilde y al tiempo sorprendente edificio junto con mis hijos Juan Carlos (arquitecto en ciernes) y Paloma, y allí tuve mis mejores recuerdos y tuve sentimientos de gratitud hacia mi tía Encarnita, quien, precisamente en Daimiel, ciudad manchega cuna de Miguel Fisac, desarrolla junto con sus compañeras Damas Apostólicas una importantísima labor humanitaria y social, ayudando a los más desfavorecidos… Extraordinarias personas que sin duda contribuyen a que nuestro mundo sea aunque sea por poco, alago más justo y humano.

Por eso quiero compartir con todos vosotros estas dos claves con las que tanto me identifico: un fantástico ejemplo de arquitectura contemporánea que lee de su entorno y lo enriquece a continuación… y de la labor callada y cálida de tantas personas que han decidido ofrecer sus vidas a los demás, verdaderos ciudadanos comprometidos a quienes tanto debemos y de quienes tanto deberíamos aprender.

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