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Con este título, “Compañeros de Oficio”, y utilizando la cordial denominación dada por Le Corbusier a los viejos artesanos de la construcción, se presenta la exposición de la Fundación Barrié de A Coruña. Se puede visitar hasta el próximo 4 de Abril en A Coruña, y su objetivo es dar a conocer la tradición y pensar hasta dónde puede llegar la arquitectura en términos de implicación social y humanista.

 En la muestra se reivindica la importancia de la arquitectura como un trabajo en equipo. Un equipo que cada vez se vuelve más multidisciplinar, en el que colaboran ingenieros, ambientólogos, antropólogos… y todo un sinfín de profesionales. Y es que a lo largo de la historia siempre ha sido así.  El mejor arquitecto siempre ha sido capaz de observar al resto de profesionales, y de intentar comprender todo tipo de oficios, de manera que su trabajo se enriquezca al máximo. El arquitecto Louis Kahn aconsejaba escuchar al hombre que trabajaba con las manos para averiguar la mejor manera de hacer las cosas.

 No es mal momento, aprovechando los tiempos que corren, para detenerse y observar qué se hacia antes, cómo, y por qué. Renzo Piano recordaba que ningún campesino equivoca la ubicación de su casa. En España tenemos la suerte de tener un Patrimonio Arquitectónico envidiable. Qué  mejor momento que ahora  para observarlo, conocerlo, descifrarlo, por supuesto conservarlo y así poder aplicar todo lo que nos enseña a lo que está por venir.  La idea no es imitar formalmente la arquitectura vernácula, sino aprender de ella, observarla y estudiar sus inteligentes y elementales soluciones, para crear propuestas de futuro renovadoras y originales.

El comisario de la muestra es Pedro de Llano, un arquitecto que en el inicio de su actividad abordó un detenido análisis de la arquitectura vernácula española, planteando la necesidad de la incorporación de la misma a su patrimonio cultural y, como resultado, tiene numerosas publicaciones, como  “Arquitectura popular en Galicia” o “Piornedo, una propuesta para la rehabilitación de una aldea de alta montaña”.  Ahora nos presenta “Compañeros de oficio” y nos remite a la obra de los grandes maestros de la arquitectura contemporánea para descubrirnos lo que ellos aprendieron de una forma de construir ajena a cualquier exceso: las humildes y anónimas edificaciones vernáculas.

En el siguiente enlace podréis consultar todo lo relacionado con la exposición: Pincha aqui.

Jesus Rubio Gómez, arquitecto de GRarquitectos