«El Territorio Comprometido»
El pasado 29 de marzo, «La Ciudad Comprometida» quiso estar en la reapertura de una de las rutas más impresionantes de la provincia de Málaga, la conocida como «El Caminito del Rey». Un itinerario que por su impresionante entorno y su historia llama a un sinfin de visitantes, pero que su deterioro se había convertido en un gran problema, hasta tal punto de ocasionar diversas muertes, lo que en el año 2000 llevó a su cierre por motivos de seguridad. En ese momento la Diputación de Málaga, con buen criterio, decidió llevar a cabo las obras necesarias para reabrir esta impresionante ruta. Dichas obras con un coste de unos 5 millones de euros, fueron un auténtico reto, por la singularidad del entorno y las dificultades de acceso. Se decidió realizar la nueva pasarela, paralela a la antigua, con tablones de madera que se adaptaran a la orografía y barandillas metálicas, que se fueron colocando por tramos, gracias al trabajo de alpinistas y técnicos.
El resultado ha sido excelente. El caminito del rey sigue manteniendo su singularidad y su belleza, manteniendo los valores naturales y paisajísticos que hacen de él un enclave digno de visitar. Para los que no lo conozcáis el itinerario es un recorrido lineal que discurre por el entorno natural del Desfiladero de los Gaitanes, en el centro de la provincia de Málaga, entre los municipios de Álora, Antequera y Ardales. Constituye uno de los paisajes más espectaculares de la sierra malagueña, con paredes escarpadas y de altura considerable, entre las que discurre el río Guadalhorce después de pasar por los embalses de El Chorro, Guadalhorce, Guadalteba y Gaitanejo.
El nacimiento de este itinerario vino de la mano de la construcción del varias infraestructuras construidas entre los siglos XIX y XX. Nos referimos a la línea de ferrocarril que conectaba Málaga con Córdoba, que discurre por la margen izquierda del Guadalhorce, y la central hidroeléctica y la presa del Chorro. Estas infraestructuras fomentaron el desarrollo de la población de El Chorro, que utilizaba el Caminito del Rey como vía de paso habitual hacia otro lugares cercanos, ya que además de su funcionalidad, contaba con luz eléctrica.
Desde aquí queremos animar a todos nuestros lectores a visitarlo, pues al contrario de lo que pudiera parecer no es un recorrido nada peligroso. Consta de unos 7,7 km, entre accesos y pasarelas, del que pueden disfrutar grandes y pequeños, y que sin duda merece la pena ver. Para todos los interesados, podéis consultar la información necesaria en esta página de la Diputación de Málaga.