«La Ciudad Comprometida»
«No me queda más remedio que salir por la rampa de los coches”
Ser mamá de gemelos es complicado. Exige duplicarse para los baños, las comidas o los cambios de pañales. Pero además, moverse por la ciudad con un carro de bebé que mide 1.20 metros de largo, es casi una proeza.
Elena Carrillo, que tiene dos bebés de nueve meses, nos muestra en este vídeo algunos de sus problemas cotidianos, como puede ser salir de un aparcamiento público cuando el carro no entra en el ascensor.
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Por M. V. Cobo. Publicado en el periódico Ideal el pasado jueves día 28 de octubre de 2010
La verdad es que parece mentira que en el año que estamos y tras esfuerzos legislativos en materia de accesibilidad sigamos encontrándonos casos tan desgraciadamente cotidianos como este. Todos podríamos hablar sobre casos similares en nuestro entorno cercano. Sin ir más lejos hace unos días contemplé una escena de este tipo con un padre con un carro doble en un centro de salud, donde lógicamente estos temas deberían estar bien resueltos. Con una mirada amplia, deberían encontrarse soluciones a estos problemas de movilidad más desde el civismo y educación de todas las partes implicadas más que a través de decretos. No hay que olvidar que todos, en mayor o menor medida, somos o seremos discapacitados o en algún momento seremos personas con movilidad reducida.