Hace tan solo unas semanas se discutía en un artículo la conveniencia de distintos tipos de combustible para vehículos. Hoy la realidad de Citroen (y Peugeot) llama a la puerta sin complejos para mostrar cómo hacer cuadrado el círculo: un coche híbrido y diésel, el Citroën DS5 Hybrid4.
La innovación es ir más allá, y se puede hacer creando algo nuevo, o desarrollando algo a partir de lo que otros ya tenían. Hace años que Toyota sacó al mercado el Prius, una berlina híbrida (eléctrico-gasolina) que se ha convertido en uno de los coches más utilizados por los taxistas, al menos en Granada. Una innovación que está dando muchas alegrías a aquellos que, como los taxistas, circulan casi al cien por cien por ciudad.
Aunque no es oro todo lo que reluce. José Manuel Castillo, de Talleres Lecrín, aclara que “en algunos vehículos híbridos como el Honda Civic 1.3 de gasolina, el consumo en ciudad es bajo, pero en autovía se dispara a 12 ó 13 litros, además la autonomía con las baterías que hay hoy está bastante limitada”. Un factor que Toyota no ha tenido en cuenta, por lo que Citroën ha ocupado el hueco con el Citroën DS5 Hybrid4, aunque sea adelantando por la derecha, ya que el sistema eléctrico utilizado por la marca francesa es similar al de Toyota.
El nuevo Citroën DS5 Hybrid4 combina un motor diesel con uno eléctrico. El eje delantero se mueve gracias al gasóleo y genera 163 CV, mientras que el eléctrico, en el eje trasero empuja con 37 CV. En total, 200 CV que permiten moverse en ciudad y autovía con un consumo que en condiciones normales no supera los 6,0 litros. Este consumo se consigue gracias a que a menos de 70 km/h el DS5 puede funcionar solo con motor eléctrico, y a partir de esta velocidad, la electricidad puede ayudar al diesel. A esta combinación también ayuda el sistema Start-Stop, aún puesto en duda por algunos conductores.
Una unión de fuerzas que hacen aún más atractivo al Citroën DS5, una alternativa real a las berlinas tradicionales, con un diseño rompedor y avances que inauguran una tercera vía entre los turismos ‘estándar’ y los Premium. Queda por saber si su precio de casi 35.000 euros convence a los potenciales compradores de Citroën.