«La Sociedad Comprometida»
Os propongo que reflexionemos sobre como deberíamos actuar para que nuestras ciudades propicien relaciones “amigables” con nuestros mayores, una cuestión de la máxima actualidad si se tiene en cuenta que el mundo se está envejeciendo rápidamente y en consecuencia se deberían adoptar medidas encaminadas a integrar las necesidades del colectivo de mayores en la configuración de las ciudades futuras.
Estas previsiones hacen que el binomio envejecimiento y urbanización, particularmente mayores en ciudades, deba ser especialmente considerado en el planeamiento de las urbes futuras, singularmente de cara a que su convivencia sea lo más amigable posible, pero también a obtener de ellos un “envejecimiento activo” por el que se faculte a las personas mayores para que contribuyan a la sociedad y participen en los procesos de tomas de decisiones, aportando su experiencia y los conocimientos adquiridos a lo largo de su vida.
Para ello, hemos pedido a Juan Garrido Clavero, uno de los especialistas de GRarquitectos que reflexione sobre ello…
“En el XVIII Congreso Mundial sobre Gerontología, celebrado en Río de Janeiro (2005), a instancia de la Organización Mundial de la Salud, se puso de manifiesto que el mundo se está envejeciendo rápidamente y en consecuencia se deberían adoptar medidas encaminadas a integrar las necesidades del colectivo de mayores en la configuración de las ciudades futuras.
Esta conclusión refrenda las estimaciones que las Naciones Unidas tienen respecto a la evolución de la población mundial, ya que para el año 2050 se prevé que el número de personas >60 años se duplique, pasando del 11% al 22%; mientras que se espera que para el 2030 el 60% de la población (hoy es el 49%) viva en entorno urbanos.
Estas previsiones hacen que el binomio envejecimiento y urbanización, particularmente mayores en ciudades, deba ser especialmente considerado en el planeamiento de las urbes futuras, singularmente de cara a que su convivencia sea lo más amigable posible, pero también a obtener de ellos un “envejecimiento activo” por el que se faculte a las personas mayores para que contribuyan a la sociedad y participen en los procesos de tomas de decisiones, aportando su experiencia y los conocimientos adquiridos a lo largo de su vida.
Esta experiencia está siendo trabajada en la “Guía de Ciudades Globales Amigables con los Mayores”, iniciativa que se enmarca en el “Active ageing: a policy framework” de la OMS; para su elaboración han participado más de 1500 mayores y 750 cuidadores/proveedores de servicios de todo el mundo, y se está poniendo en práctica en 35 ciudades, 9 en Europa (aunque ninguna en España) y 9 en Latino América.
Dicha guía tiene como propósito ayudar a las ciudades a mirarse desde la perspectiva de las personas mayores, a fin de identificar en qué aspectos y de qué manera pueden ser más amigables con los mayores, describiendo sus ventajas y barreras a través de una lista de control de características amigables, que no pretende ser un sistema para clasificar el grado de unas ciudades frente a otras, sino constituir una herramienta para la autoevaluación y el seguimiento de sus avances.
Estos parámetros pueden ser consultados en la citada Guía, descargable en la página http://www.who.int/ageing/AFCSpanishfinal.pdf, aunque ya se adelanta que versan sobre aspectos fundamentales para la convivencia entre mayores y ciudades, tales como medidas en espacios libres y edificios, transportes, viviendas, participación social, respeto e inclusión social, participación cívica y empleo, comunicación e información, y apoyo comunitario y servicios de salud.
Así, con la intervención en esta línea se logrará que el paisaje de la ciudad, sus edificios, su sistema de transporte y vivienda contribuyen a una movilidad confiada, una conducta saludable, participación social y autodeterminación o, contrariamente, al aislamiento temeroso, la inactividad y la exclusión social de nuestros mayores. Además, la existencia de una amplia gama de oportunidades para la participación social integrada con otras edades y dirigida a grupos de edad específicos fomentará fuertes lazos sociales y la autodeterminación personal de este colectivo, pues:
“El envejecimiento activo es el proceso de optimizar las oportunidades de salud, participación y seguridad a fin de mejorar la calidad de vida a medida que las personas envejecen.” (Envejecimiento activo de la OMS).
Sin embargo, como vemos en la relación de ciudades adheridas, no se encuentra ninguna andaluza ni ninguna española, cuando España tiene uno de los índices de envejecimiento más altos del mundo y Andalucía es zona de habitual reclamo para la relocalización de población senil procedente del resto de Europa, habida cuenta de sus bondades físicas y humanas.
Es por ello por lo que las ciudades españolas, y con más razón las andaluzas, deberían incluir en su planeamiento dicha adaptación, ya que no sólo se ofertaría una notable mejora en la calidad de vida de nuestros mayores, sino que incluso se promoverían nuevos pozos de empleo.”
Juan Garrido Clavero Geógrafo, Politólogo y Antropólogo de GRarquitectos
Hola, en España la primera ciudad en adherirse a la red de ciudades amigables con los mayores ha sido San Sebastián y se están añadiendo otras como Bilbao y Barcelona. Aquí podeis consultar más información http://www.imsersomayores.csic.es/internacional/ciudades-amigables.html
Saludos cordiales
ahora nos preocupamos por nuestros mayores, que en mi caso aun los tengo,pero mañana esos mayores seremos nosotros,me uno a tu inquietud,aunque en el caso concreto de Granada,tendremos que esperar a que se acaben las obras, porque no solo es intransitable para mayores,pobres de los que viven en camino de ronda por ejemplo,el caso de mi madre,lleva meses sin atreverse a dar sus paseos como solía hacer,con mas de 84 años,se encuentra rodeada de trampas en las aceras ridiculas y provisionales que hay,teniendo que invadir en varias ocasiones la calzada para esquivar las vayas que te indican el camino.
Recibe un cordial saludo
Os anuncio que en GR hemos incorporado a nuestros planes urbanísticos un apartado especciudad obre si la ciudad en cuestión es «amigable con los Mayores”
Me parece interesante el artículo y creo que los profesionales que intervenimos en el territorio no debemos olvidar nunca que nuestras acciones deben plantearse siempre contemplando como afectan a las personas, es evidente que el colectivo de personas mayores no ha sido protagonista porque ha sido poco reivindicativo, es hora de tenerlos en consideración y y ofrecerles unas ciudades mas amistosas, pero de igual manera debemos hacerlo, con los niños, con los jóvenes, con las madres, etc, no olvidemos que las ciudades son para las personas.
P.S. considero el termino amigable poco afortunado con cierta resonancia afrancesadas, me parece más acertado y adecuado que en español empleemos el término «amistoso».
Amigo y colega Miguel: un gusto verte por aqui… De acuerdo con lo que dices pero yo prefiero explicar las cosas a de casos particulares como este. Aunque esta claro que el objetivo será el diseño de ciudades comprometidas (que es como decir ciudades seguras; inclusivas; democráticas; amables; armónicas; bien dotadas y bien pensadas; bien articuladas a través de la red de transporte público, de recorridos peatonales, de parques y de dotaciones comunitarias; silenciosas, saludables; sostenibles…)
Partiendo de la base que todos esperamos (y deseamos) llegar a ser mayores, incorporar esta visión a la hora de pensar la ciudad debería ser un acto natural. Pero también incorporando la perspectiva de género y tantas otras para que nuestras urbes acaben siendo ciudades para todos. Al hablar de las ciudades me refiero desde el interior de las viviendas, los espacios comunes de las mismas, hasta el propio espacio público. Hay que superar el concepto de vivienda adaptada e itinerarios accesibles hacia otro modelo en el que ese diseño venga ya “de fabrica”.
Tal y como nos dice Isabel, en España ya se ha adherido a la Red San Sebastian, y pronto lo harán Bilbao, Barcelona y Zaragoza. ¿Cómo no?, las ciudades más punteras de España a la cabeza, como siempre. Por eso propongo que cada uno, desde su ámbito, solicite a los partidos políticos de sus pueblos y ciudades que incluyan en su próximo programa electoral de las municipales referencias a estos criterios. Ir a la vanguardia, en estos momentos de dificultades, es más importante que nunca y denota la voluntad de un pueblo.
En cuanto a Paco Camacho quería decirle que me solidarizo con su situación, al tiempo que quiero hacerle la consideración de que hasta en las obras se podrían tener especiales consideraciones con nuestros mayores, ya que normalmente las medidas de seguridad que se toman se hace para un estrato social al que se le presupone cierta forma física de la que carecen nuestros mayores.
Y a Miguel Martín qué decirle, que efectivamente los planificadores de la ciudad del futuro tienen, tenemos, que practicar sus intervenciones respondiendo a las demandas de todos sus usuarios, más allá de que unos sean más o menos «quejicas» que otros, magnífica observación por tu parte. Respecto a lo del término, efectivamente puede que éste no sea muy afortunado, pero tampoco debe ser el hecho prioritario, lo importante es que poco a poco logremos que un mayor número de ciudades se integren en esta Red y pongan en práctica sus medidas.
Zaragoza ha sido la segunda ciudad de España en incorporarse a esta red.
Enhorabuena Zaragoza… y muchas gracias a Eva. Ojalá que las ciudades españolas se fuesen adheriendo al ritmo que lo están haciendo en este blog. Y por cierto, para los más próximos, ¿Granada podría estar algún día entre éstas?. ¿Cuáles son sus dificultades?. Seguro que entre todos podriamos hacer una matriz DAFO con las Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades de Granada como ciudad amigable/amistosa con nuestros mayores ¿Verdad?.