«El Territorio Comprometido»
De acuerdo como prometí en un comentario a un post anterior (“Granada, ¿Patrimonio de la humanidad?”) vamos a tratar en este Blog de La Ciudad Comprometida las diferentes cuestiones que deben plantearse en relación con el papel que la Vega de Granada debe jugar en la construcción del espacio metropolitano. En el post del pasado 10 de Agosto, Sandra Alvarez, reflexionó acertadamente sobre El desarrollo rural en la Vega, y en esta ocasión seré yo quien aborde una segunda cuestión… ¿Cómo promover el uso público en la Vega? Desde mi punto de vista, a partir de cuatro estrategias combinadas:
1. Desarrollar e integrar diversos programas de actuación y fomentar el Uso Público de la Vega: La existencia de la propiedad privada del espacio agrícola de la Vega, materializado en multitud de explotaciones y edificaciones, no está reñida con su alta valoración desde diferentes puntos de vista -ambiental, cultural y paisajística- por el conjunto de la sociedad. Por tanto, el fomento en la Vega del uso público, con sus pertinentes limitaciones y con base en determinados elementos, se presenta como una de las más efectivas formas de apreciación colectiva y, por ende, de salvaguarda de sus valores inmateriales. Para ello, será preciso definir los ámbitos potenciales de acogida del uso público según diversos propósitos y según equipamientos específicos:
A) Ámbitos Potenciales de Acogida del Uso Público: Todos los propósitos que respaldan el uso público (el conocimiento del singular espacio de la Vega, o las actividades deportivo-recreativas, lúdico-culturales y didáctico-educativas) deberán apoyarse en el Sistema de Espacio Libres definido en el vigente POTAUG, que abarca la mayor parte de la Vega de Granada. Por otro lado, el control social sobre los espacios de uso público debe ser proyectado con la idea de la apropiación simbólica de los usuarios, por lo que la implicación en el proceso participativo se convierte en clave del éxito.
B) Definir los Ámbitos Concretos de Acogida de Equipamientos específicos para el desarrollo más adecuado del Uso Público: La implementación de programas de uso público debe implicar la transformación de espacios indefinidos en concretos e identificados (sitios), su diseño debe adaptarse a la escala del usuario y, además, debe imbricarse en redes de conectividad sin la obligación de usar el automóvil. Estos “sitios de oportunidad”, -como por ejemplo los encuentros entre caminos, entre los viarios peatonales y los ríos, los puntos de contacto entre bordes y líneas de conectividad, etc- deben ser, por tanto, identificados y potenciados para la acogida de los equipamientos específicos de apoyo al uso público.
2. Fomentar una Movilidad Sostenible apoyada en una Red de Carriles peatonales y/o de Bicicletas en la Vega: La movilidad en la aglomeración urbana de Granada es muy intensa, donde el vehículo motorizado privado alcanza frecuentes cotas de saturación. Aparte de sobrecostes económicos y funcionales, ello implica acusados efectos en el medio ambiente y en la salud. La movilidad sostenible precisa, pues, de cambios de hábitos en la población, para lo que no basta con campañas de concienciación, sino que requiere actuaciones claramente orientadas al fomento de una movilidad alternativa basada en el transporte público, en la bicicleta y en el desplazamiento peatonal. El espacio de la Vega presenta una evidente oportunidad para el impulso de los tres medios mencionados, especialmente los dos últimos.
Esta estrategia propone, por tanto, potenciar una movilidad alternativa y la compleción, adecuación y señalización de redes de caminos para usos peatonales y ciclísticos.
3. Sensibilizar socialmente y poner en valor el Paisaje de la Vega: Aún habiendo perdido parte de sus excelencias paisajísticas de antaño, presenta un paisaje valioso que, en parte, es socialmente desconocido, a veces menospreciado, y que no sólo constituye un atributo territorial significativo en el ámbito de la aglomeración urbana granadina, sino que es y puede seguir siendo un recurso económico en sí mismo, sobre todo como apoyo a las actividades turísticas.
Esta estrategia debe perseguir, por tanto, sensibilizar socialmente sobre el valor paisajístico de la Vega e impulsar medidas para su puesta en valor territorial, a través de su conocimiento y difusión, de la localización de equipamientos paisajísticos (Miradores, Centros de Interpretación, Recorridos…) y del impulso de estrategias empresariales para su aprovechamiento como recurso económico.
4. Creación de un Sistema Continuo de Espacios Libres Públicos: El conjunto de valores paisajísticos, ambientales y culturales de la Vega deben preservarse e integrarse dentro de un sistema interconectado. Para ello debe crearse una red de parques que garanticen la continuidad de los espacios libres y que permitan al habitante el uso y disfrute de un espacio de forma totalmente compatible el uso agrícola.
En este sentido, la construcción de las infraestructuras viarias o de transporte metropolitano deberá ser concebida como viales paisajísticos, y suponen una oportunidad para la creación de una red de parques lineales asociados a las grandes infraestructuras.
Asimismo, deberán desarrollarse propuestas del POTAUG donde se plantearon corredores verdes en las riberas de los ríos, ligados a la explotación agrícola de cultivos vinculados a ellas, fomentando el uso público y los recorridos peatonales y ciclistas ligados a elementos de agua.
Y por último, se deberán incluir también diversos puntos de encuentro en la red de de recorridos peatonales y ciclistas, ligados cuando sea posible a elementos del patrimonio cultural, donde se intensifique la relación con la Vega a través de miradores, carteles didácticos sobre la actividad agrícola, o simplemente sean concebidos como puntos de descanso dentro del recorrido.
La vega de Granada, eterno debate en la ciudad, al que nadie se atreve a dar soluciones, lo que provoca que poco a poco esté muriendo.
Estamos ante un gran debate. ¿Servirá este foro «bloguero» para reflexionar al respecto, buscar puntos en común e intentaremos entre todos buscar soluciones sensatas para nuestra Vega?
Mariela, discrepo contigo en lo de que nadie se atreve a dar soluciones, hay un verdadero torrente de ellas en los post de Juan Carlos y de Sandra!! Pienso que se trataría de avanzar en la búsqueda de los mecanismos que permitan que la iniciativa pública se ponga en marcha (que momento tan propicio ahora que el aumento del gasto público parece ser la receta adoptada para paliar los efectos de esta crisis!) por un lado, y por otro de estudiar igualmente fórmulas de viabilidad económica que propicien que la iniciativa privada funcione de manera compatible con la conservación de los valores de este espacio. En este último aspecto, quizás se debiera ser más atrevido, y ser capaces de flexibilizar algunas medidas de protección, que por ser demasiado estrictas pudieran acabar por ser contraproducentes al propiciar la inmovilización de los agentes privados.
Juan Carlos, lástima que no hayas podido trasladar esta mirada sobre la Huerta de Murcia, tiempo al tiempo … un abrazo y ánimo con el blog, me ha impresionado el ritmo que manteneis!
Con mi comentario anterior me refería a que a nivel administrativo, tanto local como autonómico, el debate de la vega de Granada lleva años sobre la mesa y ninguna de las administraciones implicadas se atreve, hasta ahora, a darle una solución o marcar unas pautas de actuación claras y definitivas.
Por supuesto, que tenemos claros ejemplos en este Blog de propuestas de innovación en la concepción de los espacios y los usos de la vega, y en otras muchas cuestiones de «Ciudad Comprometida». Temas con los que pretendemos desde este foro generar debate y ofrecer un espacio de opinión abierto a todos.
O se interviene sobre la vega o, al final, acabará absorbida por la edificación. Hay que tomar una decisión que, al tiempo, la ponga en valor, tal y como la entrada refleja. La no intervención no significa su conservación. Todo lo contrario. La vega ha sido excusa de intereses particulares. Quizá ahora, en plena crisis del ladrillo, sea un momento idóneo para sacar adelante un proyecto definitivo para este territorio que conforma parte del carácter granadino. Ánimo
Desde luego, existen propuestas, iniciativas y gente de la propia vega que participaría en ellas. Que aún no se haya decidido como intervenir, pienso que tiene más que ver con «qué ayuntamientos del área metropolitana van a estar deacuerdo y que actuación se va a proponer». Pienso que el consenso sobre «el qué hacer en la vega», es necesario entre los dos protagonistas principales: ayuntamientos y propietarios del suelo. Ahí entraña la dificultad de ejecutar llamémoslo de alguna manera «El Proyecto Vega». Nosostros solo somos actores secundarios, damos propuestas, inventamos el territorio y soñamos con verlo algún día. Tal vez, una de las soluciones para poder hacer arrancar un futuro sostenible para la vega, tenga que venir de la mano de una persona que sea capaz de dialogar social y políticamente con todos los protagonistas de este territorio, o tal vez no persona sino institución, que lidere el proyecto y por tanto el cambio.
Bueno, al fin, en octubre pasado el Consejo de Gobierno de la J.A. Dtermino que en breve plazo la Consejeria de de Vivienda y Ordenacion del Territorio elaborase las directrices en las que apoyar la regulación de la Vegs de Granada, a través de la formulación de un Plan Especial para dicho ámbito.
Aunque ya se ha superado la fecha iniciarnte establecida, abril de 2009, es de prever que pronto se iniciaran los tramites del plan especial… Y que conoceremos la orientación que finalmente la Junta de Andalucia establece.
Paralelamente se ha iniciado la revisión de la ordenación metropolitana -POTAUG-… Luego llego la hora del debate, de la ordenación, y de diseñar mecanismos de seguimiento y coordinación que garanticen que las propuestas metropolitanas se llevaran a cabo…
Y para la Vega… Espero que muchas y buenas propuestas de futuro de las que siempre nos sintamos satisfechos…
En efecto, se abre el proceso de modificación del POTAUG, y por tanto, es llegada la hora de las propuestas. Preservar los espacios libres es el primer paso. Establecer sobre ellos usos sostenibles y duraderos será el segundo y ahí entra la figura de ese Plan Especial, que bien podría coincidir con la aparición de la figura del Parque de la Vega Sur, figura que dará cobertura a esa preservación y a ese establecimiento de usos duraderos sostenibles: agrícola, cultural, deportivo, recreativo, y sobre todo, social. Ya he señalado varias veces que ese me parece el caminio correcto, y no seguir enquistados en el debate, que ha demostrado ser inútil, de protección si o no.
La Vega de Granada, tal y como comentais compañeros, es mucho más que un espacio verde, un área de cultivo o un terreno fértil para la especulación urbanística. Muchas veces también son fincas heredadas de padres abuelos y bissabuelos, con contrucciones centenarias, pequeñas explotaciones agrarias muchas veces mantenidas más por el romanticismo y el cariño que por los beneficios económicos que les conyeva su aprovechamiento.
Y son estos propietarios los que más sufren la incertidumbre sobre que pasará con su «cortijo» y el parque del milenio. Les preocupa si le partiran la finca en dos o si tendrá que cortar los almendros que plantó su abuelo en el fondo y que tal vez ahora estorven en el paso de de los caminos peatonales o las vías verdes.
Y es por ellos que escribo éste comentario, tal y como le prometí el otro día al «Señor Juan», un pequeño agricultor de la zona de Cúllar Vega que vende de forma ambulante lo que cultiva en su cortijo, que me preguntaba con gran preocupación que si ahora el el gobierno le quitaria su finca para hacer un parque, o si le iban a construir edificios alrededor quitándole la magnífica vista que tiene de Sierra Nevada.
«…nooooo, no se preocupe. Hay mucha gente en esta ciudad que estamos empeñados en proteger a la Vega y sus buenos usuarios, y deportar a los especuladores y los que no entienden la belleza real de éste lugar mágico.»